En el marco de la sequía prolongada que afecta a la provincia de Córdoba, el propósito de todos los entes involucrados en garantizar la provisión de agua potable a los cordobeses es definir medidas para evitar el consumo excesivo del recurso natural no renovable.
Bajo esa premisa, ayer se reunieron la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Provincia, el Ente Regulador de Servicios Públicos (Ersep), la empresa Aguas Córdoba y la Municipalidad de Córdoba.
El propósito del encuentro (el tercero que se realiza por este tema) fue aunar criterios respecto a la actuación de cada ente frente a la crisis hídrica.
Si bien no se anunció aún ninguna acción concreta, se espera que mañana cada área presente un plan de contingencia y actuación, según sus posibilidades y limitaciones, a partir de un informe técnico sobre los niveles de consumo y la situación actual del dique San Roque que elaborará la Subsecretaría con la colaboración de Aguas Cordobesas.
Y aunque los cortes aún no llegan a la ciudad de Córdoba, que se provee del agua de ese dique, tampoco se descartan, más aún si la ansiada lluvia no llega. De igual modo, se analizará incrementar el monto de las multas para grandes consumidores.
“Cada organismo presentará una serie de medidas que pueda llevar a cabo para atacar el consumo excesivo. En el caso del Ersep será lo que el Directorio resuelva, pero se analiza colocar limitadores que restrinjan el paso del agua para evitar el consumo excesivo en determinados lugares, por ejemplo. Lo mismo hará Aguas y la Municipalidad que incrementará las inspecciones”, explicó Jorge Saravia, vocal del Ersep.
Además, apeló a la concientización de los ciudadanos en general para cooperar en el cuidado del agua, evitando utilizarla para fines que no sean de consumo humano, como llenar piletas, lavar autos y veredas, entre otros.
“La carga de responsabilidad debe ser repartida entre todos, no se puede admitir el derroche porque va a terminar perjudicando a todos por igual. Tenemos que pedir la colaboración de todos frente a esta crisis hídrica”, agregó Saravia.
Mientras tanto, se difunden campañas de concientización para que la población restrinja el consumo de agua y se informe acerca de cuánto se desperdicia.
Entre los ejemplos, se menciona que cuando las personas se lavan los dientes con la canilla abierta dos minutos se gastan 13,5 litros de agua, mientras que con el pico cerrado sólo son 0,5 litros. Una canilla que gotea pierde 96 litros diarios, mientras que un caño agujereado desperdicia 3.200 litros de agua diarios, según se difunde por los medios de comunicación locales.

Cortes en Sierras Chicas
La ciudad serrana de Río Ceballos inicia hoy el cronograma de corte del servicio de agua programado en la región de las Sierras Chicas a raíz de la pronunciada bajante del dique La Quebrada. La medida abarcará, además, a las localidades de Unquillo y Mendiolaza, que también se surten del agua desde la misma fuente, donde los cortes se producirán el jueves y domingo, mientras que Río Ceballos repetirá el corte el sábado.
El intendente de esta localidad, Gaspar Lemos, justificó los cortes ante la emergencia por la extensa sequía, reflejada en la bajante de más de 11 metros de su capacidad de embalse al dique La Quebrada.
En tanto, los habitantes de esa ciudad serrana tomaban ayer las precauciones necesarias para que los tanques se completaran y poder superar la jornada de hoy, cuando el corte del suministro será total.
En Villa Allende, “los cortes se vienen aplicando de manera rotativa desde hace un mes”, dijo Maximiliano Posetti, de la Cooperativa de Agua, quien señaló que la medida se sostendrá hasta tanto no se recuperen los niveles de la planta potabilizadora de La Calera, que se nutre del disminuido dique San Roque.
En la ciudad de Villa Carlos Paz, que mantiene en vigencia la emergencia hídrica por la reducción a una mínima expresión del río San Antonio, la Cooperativa Coopi, distribuyó 60 camiones de 6.000 litros de agua a las casas de los barrios altos, donde la presión es también mínima.

Colaboración de la Crese
Debido a la crítica situación generada a raíz de la falta de lluvias, la empresa municipal Crese anunció que contribuirá a la disminución del consumo de agua en el servicio del lavado peatonal. A partir de ayer y mientras permanezca la emergencia hídrica, el hidrolavado peatonal que se hacía de manera habitual en forma diaria, se realizará día por medio. Por tal razón, desde la empresa apelaron “a la comprensión de los vecinos y solicitamos su colaboración en el mantenimiento de la zona peatonal de nuestra ciudad en función del servicio limitado que se realizará momentáneamente. Cabe aclarar que el servicio de barrido y recolección mantendrá la frecuencia habitual”, informaron mediante comunicado.

La lluvia llegaría recién a fin de mes
Las anunciadas precipitaciones siguen sin concretarse, mientras que en la tarde del lunes la situación en Córdoba empeoró porque sólo hubo fuertes vientos, que provocaron tormentas de polvo y tierra que por algunas horas obligaron a la Policía Caminera a cortar rutas por la falta de visibilidad.
Ayer el cielo estaba parcialmente nublado con una temperatura de 22 grados y el pronóstico extendido en Capital y zonas serranas ya no prevé lluvias, por lo que la situación hídrica podría complicarse.
Según anunció Juan Mario Navarro, meteorólogo y titular del Observatorio de Salsipuedes, “las lluvias que esperamos para que reviertan la crisis hídrica recién estarían llegando a fin de mes. Mientras tanto, puede haber tormentas y precipitaciones aisladas que sirvan para paliar la crítica situación, pero nada más”.