La segunda ciudad soportó el fin de semana largo temperaturas muy elevadas, lo que hace presagiar que se acerca un tórrido verano en la región.
Lo preocupante es que apenas se sintió el rigor del calor, comenzó a notarse la falta de agua potable en barrios enteros, y en otros sectores una escasa presión del vital líquido lo que impide que se eleve a los tanques domiciliarios.
La falta de agua se notó especialmente en la periferia, como el barrio 1° de Mayo, la zona de 25 de Mayo y el complejo habitacional, donde el agua llegaba a cuentagotas, o directamente no llegaba, generando serios inconvenientes en las familias tanto para el consumo que se incrementa con el rigor de las altas temperaturas, para la cocina diaria o para la higiene de las personas.

Luz
La energía eléctrica también registró altibajos en las últimas jornadas, con apagones, en algunos casos por sectores como San Cayetano, Marana y las Viviendas el día sábado y el lunes un corte general alrededor de las 18 horas.
Pero los reclamos desde los barrios también refieren a permanentes oscilaciones en la tensión, y en algunos horarios con un servicio que no alcanza la suficiente energía como para accionar equipos de frío como acondicionadores de aire o ventiladores, que son elementos hasta si se quiere indispensables para soportar el rigor del verano.