El secretario del Agua, Abel Tévez, informó ayer a Nuevo Diario que en el marco de la reunión del Comité de Cuenca Salí-Dulce que comenzó ayer en la provincia, aceptaron el planteo de Córdoba de estudiar los cupos de agua que le corresponden a cada provincia, y para ello se conformará una comisión técnica específica para determinar cuál es la demanda del recurso por parte de quienes integran la cuenca. “Primero se debe corroborar si los cupos asignados corresponden o no, y el destino que se le dará a los mismos, a través de un balance hídrico que permitirá llegar a una conclusión, y ver si es posible cambiar”, aclaró Tévez.
La disminución en los niveles de la Laguna de Mar Chiquita actúa como “disparador y genera preocupación”, lo que amerita un estudio sobre distribución de caudales, añadió.

Acueducto
Sobre el acueducto que pide el gobernador Schiaretti, llevando agua desde el Dulce, Tévez indicó que “el norte cordobés sufre un déficit hídrico y tiene carencia de agua para consumo humano. Dialogamos en la reunión y nos expresaron que no hay nada en concreto, simplemente que le habría manifestado el gobernador al ministro De Vido la necesidad de encarar un estudio para satisfacer la demanda de agua, desde el Dulce o el Paraná. Las cantidades no serían significativas para afectar los derrames anuales del Dulce en la cuenca”.
“Si para el sudeste santiagueño y noroeste santafesino con extensión de 50 mil kilómetros y una población de 300 mil habitantes, se estimó un caudal de 1 metro3/s, el 1% del módulo del río Dulce, estimamos que lo que aspira a Córdoba es mucho menor, y no genera preocupación”.