La grave situación que atraviesa Córdoba como consecuencia de la crisis hídrica que provoca una sequía de gran magnitud sumó un nuevo punto de complicación, ya que un incendio forestal de 15 kilómetros de frente avanza sin control en los departamentos de Ischilín y Punilla.
El siniestro, que comenzó en la antevíspera, se dividió en cerca de 10 frentes en la zona de Punilla, en el Cerro Pajarillo y Copacabana, donde las autoridades ordenaron evacuar a casi 40 personas.
El foco ígneo, que hasta el jueves tenía una extensión de 13 kilómetros, ayer amaneció desbordado y dividido en diferentes frentes.
El director del Plan Provincial de Manejo del Fuego, Diego Concha, manifestó que el panorama es desalentador porque "son lugares de muchas pasturas y la situación se complica", en medio de una fuerte sequía que afecta a toda la región.