Tras una acelerada creciente que forzó la evacuación y autoevacuación de cientos de familias correntinas, el Paraná regresa a la normalidad. Las autoridades de Prefectura Naval Argentina informaron que ayer la altura del río era de 5,20 metros y que los pronósticos indicaban que continuará bajando. En tanto, se estudia si los relocalizados podrán volver a sus viviendas.
En la última quincena, el comportamiento del río fue vertiginoso. Dos semanas atrás superaba la marca de los 6 metros y obligaba a ribereños de Apipé, Ituzaingó y Capital a dejar sus casas y trasladarse hacia terrenos más altos.
Los acontecimientos se sucedieron de forma acelerada y el aumento del caudal persistió hasta el pasado viernes 30 de octubre cuando se registró el pico de la creciente con 6,80 metros. A partir de esa fecha, el caudal del río se estabilizó y lentamente comenzó a descender.
Al respecto, el jefe de la Prefectura Naval de Corrientes, Héctor González, confirmó a este medio que “hasta el mediodía del domingo la altura del río Paraná en el puerto Corrientes era de 5,20 metros y que la tendencia iba a continuar siendo en bajante”, reveló.
Explicó además que la altura del Paraná está íntimamente vinculada con las precipitaciones que se produzcan en el sur brasilero y que la creciente fue producto de 5 días de intensas lluvias en el país carioca a mediados de octubre.
Asimismo, dijo que el otro factor a considerar es la altura de Iguazú que repercute de modo directo en el puerto local, y en este sentido, señaló que ayer marcaba 17,20 metros y que seguirá bajando.
En relación al posible regreso de los relocalizados a sus casas, aconsejó “ser muy cautos”. Dijo que Prefectura Naval colaboró en la autoevacuación de las familias ribereñas, no obstante, aclaró que las autoridades de Defensa Civil y Desarrollo Humano son las responsables de la asistencia y los que definen cuando es prudente la vuelta. Vale decir que este medio intentó sin éxito comunicarse con los funcionarios de las áreas antes mencionadas.
Es posible destacar que sólo en la ciudad de Corrientes hay poco más de 70 familias reubicadas en cortes de ranchos levantados en zonas más altas y que están a la espera de que el río baje. En este sentido, el director de Defensa Civil de la Municipal, Bruno Lovinson, había anticipado una semana atrás que la vuelta de los autoevacuados se produciría cuando el Paraná registre una altura de alrededor de 5 metros.
Asimismo, González subrayó que, de acuerdo a las previsiones del Instituto Nacional del Agua (INA), habrá un aumento del caudal del río Paraná para fin de año y principios del 2010. Lo que hace necesario que se tomen los recaudos y se evalúe con detenimiento si resulta conveniente que los evacuados regresen a sus viviendas frente a la posibilidad de una creciente en un futuro próximo.