Aunque la tormenta tropical Ida no causó víctimas ni daños materiales considerables a su paso por el estado mexicano de Quintana Roo, si arrasó con los arenales en playas de Cancún, restauradas el pasado mes.
Reportes llegados a primera hora de este lunes de ese balneario caribeño dan cuenta que el fenómeno atmosférico afectó un proyecto de restauración ambiental, que involucra también a Playa del Carmen, la Riviera Maya y la isla de Cozumel.
Al referirse a ese fenómeno natural, el gobernador de Quintana Roo, Félix González Canto, explicó que no ocurrieron pérdidas de arena, que lo que sucedió fue un reacomodo de ésta en el fondo marino, ya previsto por los técnicos.
Agregó que Ida no provocó erosión, sino una aceleración en el proceso de conformación y compactación de arenales dentro del mar.
Reportes de corresponsales de la televisión nacional indicaron que con el deslave de la arena se formaron escalones y pequeños acantilados a lo largo de 500 metros de playas, que en algunas zonas rebasan el metro y medio de altura.
Entre el 31 de octubre y el viernes pasado en esa zona se habían depositado unos 217 mil metros cúbicos de arena extraída por dragas del banco marino de La Ollita.
Mientras tanto, desde la capital estadual, Chetumal, se informó que con el paso de la perturbación ciclónica paralela a las costas de la demarcación, no fue necesario desalojar a ninguno de los 50 mil turistas de visita en Cancún y otros balnearios de aquel litoral.
Tampoco se suspendieron las actividades económicas y hoy continuarán las clases en los nueve municipios del estado, informó Amalia Castilla, secretaria de Gobierno de Quintana Roo.
Agregó que en el municipio de Lázaro Cárdenas, al extremo norte del estado, fueron evacuadas mil 167 personas de Holbox, Kantunilkin y de otras islas de pescadores, que se refugiaron con familiares y amigos, pero que este lunes ya retornan a sus comunidades.