"Acá en el pueblo siempre tenemos problemas de agua cuando estamos cerca del verano. Pero nunca como ahora. Esta sequía es terrible". Sandra Moyano es vecina de barrio Oro Verde, uno de los más afectados por la crisis hídrica en Salsipuedes, localidad del departamento Colón ubicada 35 kilómetros al norte de la ciudad de Córdoba.
El testimonio de esta madre de cuatro hijos (los dos más chicos, de 9 y 4 años) expresa con claridad la aflicción que, en mayor o menor medida, embarga el ánimo de las nueve mil personas que viven en esta porción de las Sierras Chicas.
Ayer, unas 940 familias (el 60 por ciento de la población) no tenían ni una gota de agua en las canillas y la Municipalidad tuvo que recurrir a seis camiones para cargar las cisternas exhaustas del pueblo y distribuir agua casa por casa.
Salsipuedes tiene 13 pozos activos. Uno de ellos se secó, siete muestran un estado crítico y los cinco restantes funcionan al 50 por ciento de su capacidad habitual de extracción, según informó el comité de Emergencia Hídrica de la localidad.
A excepción de Villa Sol, el resto del pueblo sufre la sequía de manera severa, con niveles críticos en los barrios Ariel, El Bosque, Las Tejas, Oro Verde, Villa Silvina y El Pueblito, que son abastecidos desde hace una semana por camiones cisterna.
Ayer, en varios sectores se vivieron situaciones de tensión durante el reparto domiciliario cuando algunos vecinos imploraron a los aguateros para que les dejaran un poco de agua.
"El camión tiene capacidad como para cargar ocho tanques de mil litros. A eso muchas personas no lo entienden; algunas creen que no queremos entregarles agua", comentó Hernán Labrone, empleado municipal y bombero voluntario.
Con el fin de prevenir que los excesos verbales aislados "pasen a mayores", desde ayer el reparto domiciliario se realiza con el acompañamiento de la Policía.
"La medida es sólo preventiva y con ella se busca evitar que la situación se complique más aún si se demoran las lluvias", señaló el comisario Sergio Ossés, a cargo de la unidad policial de Salsipuedes.
"Estamos definiendo un plan integral de acciones ante el panorama de riesgo que puede suscitarse si las lluvias siguen demorándose", señaló Sergio Cornejo, intendente de Salsipuedes. El mandatario calificó la situación como "muy crítica y preocupante".
La estrategia diseñada por el Comité de Emergencia Hídrica incluye la instalación de puntos fijos de distribución de agua en lugares clave para que los vecinos pueden retirarla con medios propios.
Los registros oficiales calculan que de acuerdo al tiempo de recuperación de los pozos de captación y de mantenerse el actual nivel de bombeo, el agua disponible en las napas alcanzará para una semana más.