El Gobierno provincial determinó hace unos meses avanzar sobre la empresa Aguas de La Rioja e inició una auditoría para conocer la situación financiera de la firma que tiene concesionado el servicio de agua en los departamentos Capital, Chilecito y Chamical. Posteriormente determinó intervenir la empresa y llamar a una audiencia pública que no es vinculante.
Un informe del interventor estatal de la empresa Aguas de La Rioja, Juan Luna Corzo aseguró que la auditoría realizada por la UCI detectó que Aguas de La Rioja tiene un pasivo de 35 millones de pesos. Y reclama al Estado provincial una deuda de 20 millones de pesos.
Explicó además que previo a la intervención, sobre un total de 47 perforaciones, había 12 fuera de servicio porque no contaban con sus respectivas bombas. En este sentido dijo que la concesionaria no invirtió "ni un centavo" para evitar la crítica situación hídrica que afecta al departamento Chamical.
Luna Corzo dijo que este cuadro de "descompensación entre activos y pasivos genera a la empresa una situación de impotencia para atender aspectos esenciales del servicio" y puso como ejemplo el hecho de que Aguas de La Rioja tenía gastos mensuales de tres millones de pesos pero no invertía ni en una bomba de 150 HP que cuesta 35 mil pesos.