Lluvia, viento y granizo afectaron a varias ciudades correntinas, la mayoría del Nordeste provincial pero en Ituzaingó se registraron ráfagas de hasta 120 kilómetros por hora que dejaron 12 casas afectadas, 5 evacuados y varios autoevacuados. En la zona rural de la ciudad de la energía se registró con más fuerza el temporal que dejó sin luz a decenas de localidades.
El barrio San Jorge de Ituzaingó es uno de los más afectados ya que en ese lugar las casas se quedaron sin techos y los vecinos debieron abandonar sus viviendas. También en la zona de Puerto Valle se registraron inconvenientes, como en la mayor parte de la zona rural donde una mujer resultó herida y debió ser hospitalizada.
“Muchas familias se quedaron sin techo y el Comité de Defensa Civil está trabajando desde las 5 de la mañana porque algunas personas fueron autoevacuadas, decidieron ir a casa de amigos y familiares mientras que hay otras en el Salón de Usos Múltiples (SUM)”, contó desde Ituzaingó una vecina.
La caída de postes de alta y media tensión provocó la interrupción del suministro energético desde las 5 de la mañana de ayer y recién anoche pudieron restablecer el servicio en una parte del pueblo.
Sucede que los vientos y la lluvia ocasionaron cuantiosos daños en líneas de baja, media y alta tensión especialmente en las zonas de Itá Ibaté, Caá Catí, San Miguel, Berón de Astrada, Virasoro, Santo Tomé y La Cruz.
De acuerdo a un informe emitido ayer por la Dirección Provincial de Energía de Corrientes (Dpec) la inclemencia climática originó que a las 4,57 quedara fuera de servicio la línea de alta tensión de 132 kV Rincón de Santa María en Itá Ibaté; y a las 5,34 también quedó afectada la línea de alta tensión de 132 kV de Virasoro, operada y mantenida por la empresa Electroingeniería SA. Más tarde, e Centro de Operaciones de Cammesa comunicó que dispuso el envío de cuadrillas de técnicos y de maquinaria pesada para restablecer en el menor tiempo posible el servicio de la línea afectada.
En forma paralela, y dada la magnitud del evento que provocó el corte que afecta especialmente a Virasoro, Santo Tomé, La Cruz, y Alvear, la Dpec dispuso las maniobras de cargas y aperturas necesarias para incorporar energía al sistema a través de Empresa de Energía de la Provincia de Misiones (Emsa).
Estas maniobras permitieron el ingreso de 6 MVA al sistema interconectado Virasoro - Santo Tomé, ayudando junto con los grupos electrógenos trasladados a la zona a paliar la difícil situación. Asimismo se reitera que los técnicos y operarios de la empresa Electroingeniería SA y de la Dpec se encuentran trabajando en la zona de las torres dañadas y continuarán haciéndolo en forma ininterrumpida hasta restablecer totalmente el servicio.
Vale decir que las localidades afectadas asciende a 18 porque, además de las mencionadas anteriormente, se le suman las pequeñas comunidades de Guaviraví, Yapeyú, Parada Pucheta, Bonpland, Garabí, entre otras.
En Goya llovió más de 150 milímetros en una semana
El pronóstico en Goya y gran parte de la provincia adelanta lluvias hasta el jueves y mejora el fin de semana.
Durante la madrugada y hasta media mañana de ayer cayeron 43 milímetros, lo que eleva el registro de la última semana a 152 milímetros llovidos en Goya, según informó el Programa Defensas de Goya (Prodego).
De esa manera se vivió la sexta jornada de precipitaciones, de los últimos siete días en la segunda ciudad de la provincia. Desde alrededor de las 2 de la madrugada de ayer se desató un temporal de viento y agua que sumó más de 40 milímetros.
El pronóstico del Servicio Meteorológico Nacional anticipa para Goya y alrededores nubosidad variable; probabilidad de lluvias y algunas tormentas; y vientos moderados a leves del sector sudeste.
Restablecimiento parcial de la energía en las zonas afectadas
En San Miguel, un generador móvil devolvió la luz eléctrica en las viviendas pero las calles permanecían a oscuras.
Pasadas las 21 todavía la energía no se había restablecido en el total de las localidades afectadas. En Virasoro y Santo Tomé, por ejemplo, adelantaron que recién dentro de 72 horas se podrá normalizar el abastecimiento; mientras tanto, van abasteciendo por sectores.
Por otro lado, en San Miguel pusieron en funcionamiento un generador móvil para que brinde energía a los hogares pero las calles todavía anoche continuaban a oscuras. En los parajes sanmigueleños como El Caimán, Silvero Cue y Yataitipoí estuvieron sin luz desde la madrugada y hasta las 17 de ayer cuando el servicio volvió a la normalidad.
El drama de los reubicados: el temporal arrasó con sus casas antes de regresar
Unas 15 familias que se encuentran reubicadas por la creciente del Paraná ayer perdieron lo poco que les quedaba de sus casas aún bajo agua. La tormenta arrasó con los techos de sus ranchos.
“Sobre llovido...mojado”, es un dicho popular que bien podría aplicarse a las familias de diversos barrios de la ciudad que hace semanas debieron reubicarse ante la crecida del Paraná y que, ayer, a raíz de la tormenta terminaron perdiendo lo poco que les quedaba de la infraestructura de sus ranchos aún sumergidos en el agua. “Unas 15 familias padecieron la voladura de sus techos; ahora sí que se quedaron sin nada”, graficó una dirigente de Barrios de Pie que asiste a este grupo de afectados.
Según contó Ana María Salazar, unas 15 familias de los barrios Río Paraná, Patono, Santa Marta, Virgen de los Dolores y Astilleros padecieron la voladura de techos de sus ranchos durante la tormenta con fuertes ráfagas que se desató en la madrugada de ayer. “Ahora, aunque quisieran, no pueden volver, se quedaron sin nada”, dijo la mujer.
Todavía afectados por la creciente del Paraná -aunque por estas horas el nivel del río está en descenso-, unas 60 familias continúan ubicadas en terrenos más altos de donde se hallan sus viviendas. Sin embargo, en medio de esta situación crítica, 15 de ellas ayer amanecieron con una triste noticia: ya no tenían un techo para luego regresar. “Es muy doloroso ver a personas mayores quebrados de la impotencia al ver que con esta situación lo perdió todo, producto de años de esfuerzo y trabajo”, dijo Salazar.
En este sentido, señaló que ningún funcionario de la Comuna capitalina se acercó ayer para ver la situación en la que se encontraban. Incluso criticó las declaraciones a la prensa de la directora de Defensa Civil de la Provincia, Pabla Servín, al señalar que “la situación estaba controlada y no había ningún inconveniente; cuando acá mucha gente está pasando necesidades”.
Al respecto, dijo que con el único funcionario que entablaron conversaciones fue con el titular de Desarrollo Humano, Gustavo Wacker, quien “si bien cumplió con la provisión de colchones y mercaderías, aún les debe a estos vecinos los cortes de rancho prometidos”, dijo Ana María.
Refuerzo alimentario
Por otra parte, la referente de Barrios de Pie recordó que mientras dure la creciente, los reubicados reciben la copa de leche, almuerzo y cena en los comedores comunitarios que dispone la organización en zonas aledañas a las afectadas. Por esta razón, se debieron reforzar las partidas, dijo. “Por día se sumaron unos 200 litros más de leche y 200 raciones de comida”, acotó.
Por otra parte, la mujer mostró su preocupación por “cómo bajar la asistencia médica a estos lugares ya que hay muchos chicos con infecciones en la piel, problemas de broncoespasmo y otras afecciones respiratorias. No cuentan con medicación ni revisión médica”, lamentó.
Al respecto, comentó que pese a que desde el Ministerio de Salud anunciaron que agentes sanitarios visitarían a las familias para conocer la situación en la que se encuentran “acá nadie vino a ver a la gente y los chicos se están enfermando. Tampoco mandaron medicamentos”, se quejó.
Lo cierto es que en medio de la difícil situación por la que atraviesan estos pobladores ribereños, muchos de ellos ayer padecieron más inconvenientes ya que cuando el agua baje y deban regresar a sus hogares se encontrarán con la nada y en condiciones muy humildes tendrán que buscar la forma de empezar de nuevo para ofrecerle un techo a sus numerosas familias.
EN ALGUNOS BARRIOS DICEN QUE CAYERON GRANIZOS
Muchos daños sin evacuados
La capital evidenció sus viejas fallas estructurales: calles anegadas. Cayeron árboles y se produjeron voladuras de cables. En los barrios periféricos muchos dramas, pero sin evacuados.
Con ráfagas de vientos que superaron los 62 kilómetros por hora e intensas precipitaciones, la ciudad se despertó con una mañana tormentosa. Desde el Servicio Meteorológico informaron que la lluvia caída alcanzó los 59.9 milímetros por lo que muchas calles fueron anegadas en las primeras horas del día; en tanto que los fuertes vientos provocaron la caída de algunos árboles.
El Litoral intentó comunicarse con el área de Defensa Civil de la Comuna capitalina para conocer la situación de los vecinos de algunos barrios que ante este tipo de inclemencias climáticas están “acostumbrados” a padecer sus consecuencias, como casas inundadas, calles intransitables y hasta la evacuación. Sin embargo, los intentos fueron fallidos.
No obstante ello, desde Radio Municipal indicaron que “aunque la lluvia fue abundante, no fue necesario ninguna evacuación. Ningún barrio fue afectado, con el correr de las horas las aguas se fueron escurriendo por los desagües”, enfatizaron. Sin embargo, una recorrida realizada por este medio demostró que en muchos casos no ocurrió así, incluso los vecinos manifestaron sus inconvenientes (ver página 11).
Para la Comuna, lo único que causó la tormenta fue la caída de ramas caídas; en este contexto, desde la Radio indicaron que tenían registrado solamente 3 árboles caídos en toda la ciudad, “pero que no afectó a ninguna casa ni el tránsito de alguna arteria”.
Si bien para el Servicio Meteorológico no se registró la caída de granizos, vecinos de los barrios Paruqe Cadenas y Bañado Norte comentaron que en estos sectores observaron algunas formaciones de hielo durante la madrugada.
Como ocurre con cada tormenta que sucede en la ciudad, muchas de sus calles fueron intransitables hasta pasado el mediodía; especialmente las del microcentro. Por caso, sobre Catamarca, entre 25 de Mayo y Quintana, sus veredas quedaron bajo el agua, convirtiéndose la cuadra en un espejo de agua, cual laguna. Lo mismo ocurrió en la esquina de Quintana y Córdoba, pese a que en esa zona y durante más de un mes, poco tiempo atrás, el área de Obras Públicas del Municipio había realizado tareas para evitar que ese sector vuelva a inundarse. Algo que en la práctica no ocurrió.
Los cables colgando por otros o recostados sobre las paredes también se pudieron observar en diferentes puntos de la ciudad, como así también la caída de cartelería de comercios. Pero los mayores daños a raíz del temporal se sintieron en el interior provincial (ver página 17).
El tiempo
Al parecer, el tiempo irá mejorando con el correr de las horas de hoy y se descartan nuevas precipitaciones. Desde el Servicio Meteorológico informaron que para la mañana se esperan neblinas, nubosidad variable con vientos leves del sur rotando al sector este.
En tanto que para la tarde-noche, la nubosidad seguirá variable con vientos leves avanzando hacia el este. Para mañana, se aguarda un tiempo inestable. Para hoy la temperatura mínima será de 19°C y la máxima en 27°C.
LOS NUMEROS
59.9
Milímetros es la lluvia caída en la ciudad, desde las 5.25 hasta las 15 de ayer, según el Servicio Meteorológico.
EL DATO
La temperatura mínima registrada ayer fue de 17.9°C, a las 8; en tanto que la máxima se situó en los 22.3°C a las 16.
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