La desaparición de un arroyo que corría por Villa Ciudad Parque –comuna de Calamuchita vecina a Villa General Belgrano– que una década atrás tenía un caudal de dos metros y que desde hace algunas semanas se transformó en un cauce seco, fue denunciado por varios vecinos ante organismos provinciales.
Los reclamos apuntan a que serían los trabajos de succión y embalsamiento hechos por un complejo turístico, para presuntamente alimentar lagunas artificiales en una cancha de golf, los que habrían provocado la situación. Con la actual sequía, la situación llegó a su punto límite, aseguran los vecinos.
Roberto Valle es uno de los denunciantes. Interpreta que se trataría de un “caso de usurpación de agua de un arroyo y desvío del curso de agua”. En su caso, asegura que en su propiedad ya no tiene agua, que obtenía de esa fuente, para satisfacer sus necesidades básicas. Reclamos similares radicaron otras personas, cuyas propiedades están emplazadas del otro lado de la ruta 5, que atraviesa Calamuchita.
Un vecino de Villa Ciudad Parque presentó un recurso de amparo para que la Justicia intervenga y haga “aparecer” el agua.
Los primeros reclamos comenzaron a llegar a la comuna de Villa Ciudad Parque en marzo de 2008. Días después, la comuna solicitó la intervención de la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Provincia. Se sumaron luego denuncias de otros particulares. Según aseguran, la repartición provincial aún no mandó a inspeccionar el sitio.

Sin respuestas. Valle –quien es también empleado de la comuna de Ciudad Parque– señala que se les informó que el expediente estaba archivado. Ante esta situación, decidió presentar un recurso de amparo en los Tribunales de Río Tercero, que fue denegado.
En el lugar, los vecinos indicaron que existen obras de medio siglo atrás, como puentes y alcantarillas, que prueban la existencia del cauce que desapareció. Y aseveran que son las obras de captación, endicamientos y redireccionamiento de cauces las que impiden el escurrimiento natural de las aguas, que ya no llegan a muchos campos por donde antes pasaban.
“Se hacen endicamientos para generar lagunas artificiales, tomando el agua proveniente de las Sierras Chicas de varios afluentes, uno de esos normalmente corría por el campo de la hostería e ingresaba por nuestro campo del que nos proveíamos el agua para la vida de nuestra familia. A partir del año pasado, ya comenzó a mermar mucho, hasta que algunos días ni ingresaba agua a la cisterna por la que nos proveemos para vivir”, apuntó Valle. Luego explicó que se sumaron otras obras en los últimos tiempos que retienen todo el caudal (que por la sequía actual ha disminuido), lo que provocó que se secara del todo ese cauce. “Hace semanas que no tenemos una gota de agua”, apuntó.
También manifestaron reclamos vecinos de Villa General Belgrano, puesto que este arroyo es afluente del Barranca de Los Loros, cuyo caudal también disminuyó notoriamente el último año.

“El problema es la sequía”. Carolina Pérez Mesa, encargada del complejo La Posta, negó que ese establecimiento tuviese responsabilidad en la desaparición de un arroyo. Señaló que, desde hace tres años, la empresa abrió un expediente en la ex Dipas (hoy Subsecretaría de Recursos Hídricos) y –según explicó– se estableció que el arroyo en cuestión tiene “nacimiento, filtración y desaparición como tal en el mismo establecimiento”.
Según la ley, un curso de agua que nace y muere dentro de una propiedad, es privado.
“Se han hecho limpiar vertientes, no hemos hecho nada que no sea para beneficio. La realidad es que no hay agua en ningún lado, por esta sequía”, acotó. “Eso debe ser otro arroyo”, apuntó respecto a las denuncias de los vecinos que hablan de la desaparición del cauce.
A su vez, reconoció la existencia de las lagunas en su complejo de golf. “Básicamente lo que hicimos fue impermeabilizar, para que el agua no se pierda por infiltración natural. Por eso las tenemos de reservorio, en este momento los green se riegan con agua de esas lagunas”, indicó.