Se reunió ayer en el local de la AER Inta la comisión provincial permanente de emergencia agropecuaria para analizar los efectos de las bajas precipitaciones de los últimos meses que afectan al sector agropecuario. La semana próxima habrá una nueva convocatoria. De esta forma continúan cumpliéndose los pasos necesarios para una posible declaración de emergencia por regiones
El siguiente paso de la comisión es proponer que determinadas regiones sean consideradas para entrar en emergencia y sugerir las que se solicitarán a nivel nacional para atender los problemas derivados de la escasez de precipitaciones.
Participaron de la reunión el Subsecretario de la Producción Sustentable Alejandro García, el Subsecretario de Coordinación y Programación Raúl Barberis, el director de la Producción Edgar Pajuelo, el director de Registro, Control y Fiscalización Orlando Mendoza.Asistieron además representantes de las sociedades rurales de distintas localidades, miembros de entidades que representan a productores como Federación Agraria, DEPROA, y también estuvo representado el Consejo provincial de Municipios, a través de su presidente Lorenzo Smith.Además concurrieron representantes del INTA, SENASA, Cámara Regional Económica de El Colorado, Consejo de Ingenieros Agrónomos, Federación Económica y técnicos del ministerio de la Producción y Ambiente.
En el inicio, los técnicos de la Dirección de Producción mostraron gráficos y estadísticas de registro de precipitaciones y temperaturas en las diferentes regiones de lo que se concluyó que la mayoría de las regiones se han registrado lluvias por debajo de los promedios, exceptuando la zona subtropical y parte de la región litoral que estarían dentro de los valores normales. El análisis permitió exponer que existen tres zonas muy comprometidas por la escasez de lluvia, la oeste, central sur y la Pirané-Sur, estas dos últimas con valores inferiores a los valores promedios.
Estos efectos fueron incrementados por las altas temperaturas reinantes en la última semana.Posteriormente se hizo una presentación de la situación actual de los sistemas productivos en cada región, de la que se concluyó que las cuencas productivas más afectadas fueron las sandias y zapallos, con importantes pérdidas en Las Lomitas y Pirané Sur.Los cultivos de maíz, sorgo y girasol no tuvieron pérdidas altamente significativas, mientras que los cultivos de trigo sufrieron un menor impacto, mencionándose que se han cosechado rendimientos desde 1700 hasta 3000 kilos tanto en el sur como en el norte de la provincia.Durante la reunión se mencionó que el cultivo de arroz no se vio afectado por la sequía, porque recibe riego y se halla en un 80% sembrado, un área que se expandió el doble con respecto al año pasado.