El gobierno bonaerense prorrogó hasta fin de año el estado de emergencia y/o desastre agropecuario de parcelas rurales de la provincia afectadas por la sequía.
La medida publicada en el Boletín Oficial del pasado martes ?se fundamenta en la crítica situación por la que atraviesan numerosas explotaciones rurales, con motivo de fenómenos naturales adversos de carácter extraordinario?, según se explicó.
Por estar comprendidos dentro de la emergencia nacional, la disposición del gobierno provincial exceptuó del beneficio a los partidos del sudoeste, los más afectados por la sequía. Estos son: Patagones, Villarino, Bahía Blanca, Puán, Tornquist, Saavedra, Adolfo Alsina, Coronel Rosales, Coronel Dorrego y algunas circunscripciones de Guaminí, Coronel Suárez y Coronel Pringles.
La medida adoptada en el decreto alcanza ?exclusivamente, a los productores que desarrollen como actividad principal la explotación agropecuaria?, los cuales ?gozarán de los beneficios con respecto del pago del Impuesto Inmobiliario Rural?, según se explicó en el decreto provincial.
Los beneficios
Cabe recordar que el estado de emergencia fue dispuesto por primera vez por el gobernador Scioli a principios de este año -y por un período de siete meses- para ofrecer un paliativo frente a los perjuicios provocados por la sequía en territorio bonaerense.
El decreto instruye al Banco Provincia (Bapro) a postergar el pago de las cuotas de los créditos que hayan tomado con esa entidad los productores perjudicados por la falta de agua y a la Agencia de Recaudación Buenos Aires (ARBA) a suspender el cobro de los tributos provinciales a los productores declarados en emergencia, y a dejar de cobrarlos a los contribuyentes que se encuadren bajo la declaración de desastre agropecuario.
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