El gobierno nacional inició ayer la entrega de subsidios a productores de Stroeder por un monto total de cinco millones de pesos para atender la emergencia ocasionada a medio millar de productores afectados por una sequía de carácter terminal.
A cada uno se le asignó un monto de 10.000 pesos. Serán cancelados en dos tandas hasta el lunes en cuentas del Banco de la Nación Argentina (BNA), en base a un listado aceptado por el Ministerio de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos a la Federación Agraria Argentina (FAA).
La entrega se hizo en un acto simbólico realizado en esa localidad con la participación del gobernador Daniel Scioli, el titular de esa cartera nacional, Julián Domínguez, y el intendente Ricardo Curetti.
Pese al momento aciago que atraviesan esta franja productiva, la comitiva tuvo una cálida recepción con aplausos, incluso prodigados hacia la presidenta Cristina Fernández de Kirchnner, cuando el ministro Domínguez le trasladó el saludo personal en la sala colmada de la Escuela N° 9.
Scioli, Domínguez y Curetti se habían reunido -antes de trasladarse a Stroeder- en el club Jorge Newbery de Patagones, donde analizaron la situación financiera del sector. Allí, debieron escuchar algunas quejas relacionadas con la pesada deuda de seis millones de pesos que arrastran desde que el ministro de Economía de la última dictadura militar, José Alfredo Martínez, indexó créditos a través de una tristemente célebre Circular N° 1.050 emitida por el Banco Central de la República Argentina (BCRA); indicaron asistentes a ese encuentro.
Fue por ese motivo, que el gobernador cosechó aplausos cuando anunció en el acto la creación de un Fondo Fiduciario del Banco de la Provincia de Buenos Aires para hacerse cargo de los compromisos financieros que los productores mantienen con el BNA. También se comprometió a poner en marcha la Ley de Promoción del Sudoeste bonaerense, que otorgará 20 millones de pesos anuales a la región más castigada de la provincia. "Viví muchas adversidades, y aprendí que pueden transformarse en una oportunidad, por lo tanto aquí estamos a tiempo para trabajar", resaltó en medio de una acogida favorable por parte del público.
La recepción en Stroeder estuvo a cargo del delegado regional de la FAA, Alcídes Haure, quien fue largamente ovacionado cuando le advirtió a las autoridades que la entrega del subsidio representa "un alivio que puede durar algunos meses", desplegando luego un rosario de reclamos. Apuntó principalmente a que apure el decreto nacional que califica a la zona como de desastre agropecuario.
Como una segunda actitud reparadora hacia los productores anticipó que junto a trabajos técnicos que se desarrollarán para encontrar soluciones de fondo al problema de la sequía, será creado el Instituto de Regulación del Suelo, con la intención de limitar el uso excesivo.
El gobernador bonaerense recorrió parte de la zona afectada por la sequía y dijo, "lo que he podido ver en forma directa supera las imágenes de la televisión y todo lo que a uno le han contado".