El Servicio Regional de Salud (Seres), detectó el incremento del índice de enfermedades diarréicas en menores de cinco años, que estarían relacionadas a la falta de acceso a agua potable y que podría influir en el brote del cólera.
Los cambios climáticos registrados en las últimas tres semanas donde la ciudad de El Alto tuvo un acenso de sus temperaturas hasta los 20°C, como temperaturas máximas, aspecto que genera diferentes brotes epidémicos, relacionados a infecciones estomacales, las cuales causan diarreas.
En los casos de menores de cinco años las enfermedades diarréicas podrían incrementar los datos de muerte de los 8.426 nacidos vivos que se registra por año.
“A nivel epidemiológico, los cambios de temperatura que se registran en la ciudad de El Alto y otras regiones tropicales puede incrementar el número de afectados, por tal razón se establece una alerta, ante el posible incremento de casos”, explicó Nelson Chavarría.
Al momento se verifica estudios de laboratorio de los casos diarréicos presentados en niños menores de cinco años, de los cuales al momento no se registra el vibrión cólera.
“Se han colocado Isopos, que son pequeños frascos en los diferentes ríos de la ciudad de El Alto, para el análisis correspondiente cada 15 días, para establecer la presencia del cólera, aspecto que a la fecha aún no se registra, pero ante la falta de agua potable en los domicilios del D8, D7 y los constantes cortes del suministro en algunas urbanizaciones políticas de los distritos municipales de los distritos 1, 2, 3, 4 y 5, ponen en riesgo la salud, a favor de registrar la presencia del cólera en nuestra ciudad”, advierte el profesional médico.
De acuerdo al profesional la falta de servicios básicos, especialmente el agua potable, en los sectores más pobres, ante el incremento de las temperaturas y al no poder mejorar la higiene corporal y de los alimentos, se genera mayores casos de infecciones estomacales rutinarias.
“El cólera es un proceso de infección mucho más peligroso de las diarreas comunes, porque el cuerpo agudiza los procesos de diarreas, generando mortalidad en los menores de cinco años e incluso con mayores probabilidades a las personas mayores de 60 años”, observa el epidemiólogo.
PREVENCIÓN
De acuerdo al profesional de epidemiología las familias que reciben agua por cisternas, al igual que aquellas que guardan el agua en turriles o plásticos, deberán hacer hervir el agua, aunque sea potable, porque la reserva del líquido elemento, genera mayor posibilidad para el cultivo de diferentes bacterias y virus infecciosos.
“El agua por cisterna o la que reservamos en turriles, ante la escasez en diferentes distritos municipales, pone en riesgo la salud de la población quienes, sobre todo los niños, llegan a consumir sin hacer hervir, aspecto que puede no sólo generar procesos infecciosos diarréicos, sino la aparición del cólera en nuestra ciudad”, aseguró Chavarria.
OTRAS ENFERMEDADES
Otras de las enfermedades que pueden incrementarse, pero en lugares tropicales son la malaria, por incremento de los insectos con el factor plasmodium vibrión fasial, la lesmaniasis, el dengue o la propia fiebre amarilla.
“Estas enfermedades si bien son registradas en lugares tropicales, pero como en la ciudad de El Alto es una población migrante hay la posibilidad de transportar dichas enfermedades des lugar de trabajo al lugar donde viven con su familia, es por eso que recomendamos ante cualquier sintomatología de registrar incremento de temperatura, la población debe asistir a algún centro de salud”, recomendó el especialista.
En el caso de la lesmanissis, Chavarria reconoce que dicha enfermedad si bien no genera incremento de la temperatura, pero entre las sintomatologias se presentan mayor flujos nasal, crecimiento de las fosas nasales o brotes de heridas en la parte nasal, enfermedad que de la misma manera sólo es tratada en centros médicos. |
|
|