Los picos de crecientes del Paraná que se experimentaron hacia fines de octubre aparentemente continuarán presentándose en lo que queda de la primavera y durante el verano, según informes oficiales que se manejan en Corrientes.
Precipitaciones de normales a superiores a lo normal, con alta variabilidad espacial, se prevén en el Centro-Sur del Litoral, el Uruguay y el Sur del Brasil, como también lluvias por encima de lo normal en el Norte del Litoral y Este del Paraguay.
Esta situación aparece “como consecuencia de las anomalías de temperatura del océano Atlántico” y en momentos en que el fenómeno de El Niño está desarrollando condiciones en el Pacífico ecuatorial.
Así lo hizo saber un estudio elaborado por el director de Hidrovías e Infraestructuras, del Ministerio de Obras y Servicios Públicos de la Provincia, Antonio Lorenzo López, quien elevó a las máximas autoridades del área para su evaluación e impacto en las zonas ribereñas de la provincia.
“La perspectiva para el próximo trimestre indica precipitaciones superiores a lo normal en la cuenca” del Paraná, dijo. “La primavera -por otra parte- es la temporada donde normalmente se producen las lluvias más significativas. Por lo tanto, se esperan recuperaciones persistentes de caudal” del río.
“Los resultados de los Centros Mundiales de Pronóstico Climático pronostican con mayor probabilidad lo siguientes: 1) En el Centro-Sur del Litoral, República Oriental del Uruguay y Sur del Brasil se prevé un patrón de precipitación normal o superior a la normal. 2) En el Norte del Litoral y Este del Paraguay se esperan lluvias por encima de lo normal, con alta variabilidad espacial”.
La advertencia tiene especial significación, ya que considerando la perspectiva climática y la condición hidrológica actual de la cuenca, se espera que se afirme el cambio observado en las condiciones del valle fluvial del río Paraná en los próximos meses.
López señaló también que “para los comienzos del 2010 también se prevé un escenario probable de aguas normales a altas, por encima de los niveles observados en los últimos años”, aunque “aún no puede precisarse indicó- una comparación con el escenario de inundación vivido en los meses de febrero a mayo de 2007”.