Los doctores Oscar Amin y Laura Comoglio, junto a la licenciada Soledad Diadoto, expusieron ayer ante los concejales Luis Cárdenas, Juan Carlos Pino, Mario Llanes y asesores de los bloques del cuerpo, un informe compacto que resume más de 19 años de trabajo investigativo sobre el estado de contaminación ambiental del área costera de la ciudad de Ushuaia, con el objetivo de abordar una problemática que tiene como protagonista a la acción del hombre sobre el ecosistema.
Desarrollado sobre el litoral de playa que contornea y dibuja de este a oeste, el límite urbano sur de Ushuaia, el trabajo muestra un paulatino avance de la degradación y contaminación que sufre la ciudad, a partir de los estudios que viene desarrollando la entidad a través del laboratorio de contaminación marina desde 1990. Demostrando con datos de alta precisión, como impacta lo que de manera permanente la ciudad arroja en materia de compuestos contaminantes y que van produciendo un desequilibrio tanto en la playa como en el litoral marítimo.
Agentes patógenos, hidrocarburos, plaguicidas y metales pesados son algunos de los peligrosos componentes que han sido detectados en ellas, no solo por lo que se deposita de manera directa, sino también proveniente a través de arroyos y chorrillos que llegan de manera natural y artificial, por la falta de definición en cuanto al manejo de la estructura que tiene a su cargo el tratamiento del líquidos cloacales, la inexistencia de plantas para tal fin y el desinterés colectivo de los ocupantes costeros, como empresas, industrias, comercios y habitantes individuales.
En la exposición que se realizó dentro de la Comisión de Obras y Servicios Públicos, los científicos hicieron fundadas advertencias respecto a lo que se ha venido encontrado durante los estudios, en las 9 áreas de investigación que ese laboratorio efectúa en la costa del Beagle, desde la desembocadura del Río Olivia hasta el sector hotelero próximo al barrio residencial Bahía Cauquenes. Apuntando como áreas de mayor contaminación, el sector portuario, el frente ahora de piedra de lo fuera el club náutico, el perímetro lindero a la planta orión, la bahía golondrina y la bahía encerrada.
Para darle continuidad al estudio y evaluar posibles caminos de solución a la contaminación costera, los Concejales acordaron sumar al análisis técnico y político a los responsables de diferentes organismos y entidades públicas, entre ellos a la DPOSS, la Dirección Provincial de Puertos, la Secretaria de Desarrollo Sustentable y Ambiente de la Provincia y el Departamento Ejecutivo Municipal a una próxima reunión prevista a llevarse a cabo el próximo lunes 23, en el marco del proyecto de Iniciativa Popular para declarar Reserva Urbana Ambiental Presidente Raúl Alfonsín a la costa del Beagle, que lleva adelante Participación Ciudadana, el diario del Fin del Mundo, junto a un grupo de empresas e instituciones de la ciudad.