Más de 15 cuadras de la Zona Baja de Encarnación quedaron bajo agua, como consecuencia de la torrencial lluvia registrada el fin de semana que nuevamente hizo crecer el río Paraná, que ayer superó la última marca con 7,15 m, en el eje Encarnación-Posadas. Cientos de comercios y viviendas quedaron totalmente anegados, varias calles fueron clausuradas y en el caos se apoderó de la zona. Los trabajadores se pasaron horas desaguando los negocios con baldes, mientras otros trasladaron sus mercaderías en medio del agua.
La principal arteria de Encarnación, Mariscal Estigarribia, está intransitable por la crecida desde Iturbe hasta el río. La cuadra más afectada es entre Yegros y Molas, donde la mayoría de los negocios están inundados. Debido a la clausura de la calle principal de la Zona Baja, para salir de la zona se usa la calle Mallorquín. La zona de Molas y General Artigas también está anegada. Por lo tanto, en varios sectores del circuito comercial de la Zona Baja se puede acceder caminando por el agua o sobre bolsas de arenas o maderas que se utilizan como puentes sobre las veredas.
Esta nueva crecida del río Paraná comenzó el fin de semana con la caída de unos 150 milímetros de lluvia, lo que hizo subir nuevamente el nivel del río e incluso pasó la marca de la inundación de la última vez que se registró el mes pasado, y ayer alcanzó 7,10 metros.
Esta situación también afecta seriamente a las familias que viven en barrios como Mbói ka’e, Barril Paso, Santa Rosa, y San José, de Encarnación; Carmelitas y San Francisco, del distrito de Cambyretá, ciudad vecina de Encarnación.

PEDIDO DE FRANCO
El Presidente de la República en ejercicio, Federico Franco, “instruyó” ayer al titular de la binacional Yacyretá, Carlos Cardozo, a realizar todos los procedimientos operativos necesarios a fin de solucionar la caótica situación por la que atraviesa la ciudad de Encarnación y otras ciudades aledañas afectadas por la crecida del río Paraná.
“Conforme a lo conversado previamente vía telefónica le instruyo se sirva realizar todos los procedimientos operativos necesarios en la zona de afectación del embalse de la Represa de la entidad Binacional Yacyretá”, sostiene la nota emitida por la vicepresidencia ayer. Asimismo, sostiene que “al mismo tiempo sírvese mantenerme informado así como al Gobernador del departamento de Itapúa, Juan Afara, de todo cuanto ocurra con el tema mencionado”.

Reacción:
“Este fin de semana empeoró la crecida”
- TERESA ARENA, COMERCIANTE
“Hace dos semanas que estamos en el agua, pero este fin de semana empeoró la situación a raíz de la crecida”, dijo Teresa Arena, consultada sobre cómo vivió el último fin de semana con la inundación del Paraná.
Agregó que esta situación genera cuantiosas pérdidas económicas, ya que muchas mercaderías se mojaron, se echaron a perder, otros se rompieron al mover de lugar. “Nosotros tenemos por ejemplo empleados que trabajan con nosotros 6, 7 personas y si uno no trabaja, no genera, cómo va a poder mantener a su personal, tienen que ser despedidos únicamente, hasta ahora no le despedimos a ninguno, porque creemos que esto se va a normalizar otra vez, pero ahora estamos con el temor de un nuevo temporal”, indicó la mujer cuyo negocio se encuentra sobre Estigarribia entre Molas y Yegros.

“Tengo que cruzar el río para vender”
- DANIEL FERREIRA, AFECTADO
“Tengo que cruzar el río para poder vender algo”, dijo Daniel Ferreira, un comerciante que debe cruzar caminando la calle totalmente inundada hasta la otra vereda. “Esto es por el hecho de que no podemos dejar de trabajar, la necesidad, la cuenta no nos espera, esta es la situación de la mayoría de los comerciantes que estamos en este sector”, dijo Ferreira.
“Suele llover pero en 20 minutos ya suele bajar el agua, pero esta vez no, creo que esta gente (Entidad Binacional Yacyretá) está haciendo a propósito, la intención de ellos fue sacarnos con el agua de acá, y están logrando, porque uno se cansa, a lo mejor me voy a dedicar a la delincuencia por el hecho de que yo no se hacer otra cosa que comercializar; yo tengo empleados que están cansados, ya no quieren venir, les tengo que rogar que sigan trabajando conmigo”, indicó Ferreira.