Los legisladores de la Comisión de Educación de la Legislatura de Jujuy recibieron este martes, a la bióloga del CONICET, María Eugenia Farías quien encabezó el equipo de científicos que descubrió en la Laguna de Vilama, ecosistemas microbianos de gran valor científico, patrimonial, económico y biotecnológico.
La diputada Susana Pantoja presidió el encuentro del que participaron los diputados Pablo Baca, Gregorio Tolaba y Miguel Morales, quienes presenciaron la proyección de un material realizado por el Equipo del Laboratorio de Investigaciones Microbiológicas de Lagunas Andinas, del PROMI, instituto del CONICET con base en Tucumán. La bióloga María Eugenia Farías explicó a los legisladores la importancia científica y patrimonial del hallazgo realizado en la puna jujeña, así como hallazgos similares efectuados en la provincia de Salta, donde se encontraron estromatolitos vivos, que son asociaciones de algas y bacterias que precipitan minerales formando rocas orgánicas. Los estromatolitos tuvieron un rol fundamental en la conformación de condiciones de vida en la tierra, hace unos 3 millones de años, ya que fijaron el dióxido de carbono y liberaron oxígeno a la atmósfera, transformando al planeta en un lugar apto para la vida.
En el caso de Jujuy se encontraron tapetes microbianos en la Laguna de Vilama ubicada a 4.600 metros sobre el nivel del mar, en el límite con Bolivia. Estas alfombras microbianas están constituidas por algas y diversas bacterias que van reciclando todos los minerales y compuestos necesarios para la vida, por ello revisten una importancia fundamental en materia científica, biotecnológica, patrimonial y turística. En tal sentido, la científica solicitó a los legisladores su intervención para que en Jujuy se adopten medidas de protección de este patrimonio, como la inclusión del patrimonio biológico y microbiológico dentro de la futura ley de patrimonio. También señaló Farías la necesidad de implementar sistemas de vigilancia para preservar a estos tapetes microbianos de depredaciones turísticas y científicas. Precisó la bióloga el altísimo valor económico que tienen estos tapetes y el interés que pueden despertar en la industria farmacéutica, por ello consideró pertinente la adopción de normas protectivas que eviten, por una parte la afectación de este patrimonio por acciones como el impacto de la minería, del turismo, y por otra el saqueo científico y tecnológico.
Al término de la reunión los legisladores presentes asumieron el compromiso de avanzar en la definición de normas protectivas y acordaron gestionar la adopción de las medidas de control y vigilancia requeridas por la bióloga.