Esta situación se agrava ante “la entrada decidida del verano, que si bien se vio, gracias a Dios, algo aliviada por la reciente lluvia generalizada, no cambia en meses la situación. Sí la puede cambiar puntualmente, focalmente, pero nada más”.
Morisoli adelantó que invitará a los diputados de la comisión “a una charla pública en Santa Isabel que se hará a la brevedad, con la presencia del subsecretario del Ministerio del Interior, José Luis Bravier, que es encargado de las cuencas hidrográficas argentinas. Sólo esperamos la confirmación del día en que llegaría a La Pampa para acompañarlo con los intendentes, los diputados, los crianceros, los ribereños, las fuerzas vivas de la región y así les pueda responder toda su requisitoria e interiorizarlo de una situación muy difícil, ya que se está llevando agua en camionetas y camiones tanque, tanto para la bebida como para el abastecimiento ganadero. Entre todos pensaremos cómo será el futuro de la zona si estas características climatológicas se siguen repitiendo por varios años seguidos”.
Morisoli dijo que “lo único que hay que lograr es que venga más agua para ambos ríos y para esto hay que apelar al Gobierno Nacional y al raciocinio de los demás argentinos que viven en las provincias de Cuyo, que es desde donde los ríos vierten sí o sí en el Desaguadero Salado que se conduce por el centro de nuestra provincia. Estas cuencas no tienen ningún tipo de organización, las administran en San Juan, por ejemplo en el río Hachen, y los cuatro ríos mendocinos que vierten en el Desaguadero, que son administrados por Mendoza, donde nosotros no tenemos ningún tipo de participación. Hacia allí tenemos que ir, esto es durísimo de conseguir porque de lo contrario se hubiera conseguido en años anteriores”.
“La lógica que aplican -indicó- para no abrir las compuertas en Mendoza o San Juan es porque ha habido un invierno muy poco nevado en la cordillera de esas provincias y por eso a los pequeños diques que tienen los regulan al máximo no dejando salir nada más que un mínimo que pueda correr sólo en sus provincias”.
“El convenio que debía haber ratificado la Legislatura mendocina para que hubiera un flujo permanente de agua del Atuel en La Pampa a cambio de obras de infraestructura en la provincia cuyana sigue igual, no ha habido avances en su tratamiento. Lo que sí hemos advertido es que la Dirección General de Irrigación está haciendo obras sobre el curso inferior del río en Mendoza para que algunos canales permitan una llegada de entre tres y cinco metros cúbicos a La Pampa. Esperemos que esas obras estén terminadas antes de fin de año”, finalizó.

Comisión
El secretario Morisoli, junto a sus más inmediatos colaboradores, ratificó todo lo expresado a los periodistas previo al encuentro con los legisladores.
El asesor de la Secretaría de Recursos Hídricos Matías Regazzoli confirmó que se encuentra en una instancia administrativa el pedido del Estado mendocino de derogar el Decreto 1.560, del año 1973, por el cual La Pampa cobra las regalías e incluso con la intención de cobrar, actualizado al presente, lo que ha percibido el Gobierno pampeano en ese tiempo.
Morisoli apuntó sobre el seguimiento que se está haciendo sobre esta situación, en que Mendoza sigue avanzando, que “tenemos que estar mirando el último papel en los expedientes”. Agregó que “estamos trabajando con la UVT de la Universidad Nacional de La Pampa para que realice un cálculo del pasivo ambiental desde el corte del río Atuel hasta la fecha”.