Desde esta semana, cuatro inspectores de la municipalidad de Necochea comenzaron a salir a la calle con una exclusiva y nueva función: la de evitar el derroche de agua. Como en Tornquist -donde la preocupación por el tema también se convirtió en prioritaria con el avance de la emergencia hídrica- la función de los inspectores de Necochea, inicialmente es sólo educar, apuntando a casos puntuales como los excesos en el riego de parques y el lavado de autos y veredas. Pero esto será sólo en la primera etapa y, más cerca del verano y con la población concientizada, llegará la hora de las multas para los que derrochen.
Necochea y Tornquist son dos de los primeros municipios bonaerenses que, en el marco de la emergencia hídrica que afecta a la Provincia disponen desde esta semana de normativas que permiten sancionar a quienes derrochen agua. Desde esas comunas destacan que, por ahora no se han aplicado sanciones, dado que en esta primera etapa se apunta a cambiar hábitos a partir de la educación. Es por eso que, junto a los operativos de control también se implementarán charlas en las escuelas y programas para resolver las pérdidas en las redes municipales.
Pero los casos de estos dos municipios -y otros que en este momento estudian implementar medidas similares en la Provincia- ponen en evidencia una preocupación que crece y que se relaciona con el derroche de agua potable, presente en todo el territorio provincial y también en La Plata: así, mientras la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que el gasto de agua potable por persona y por día no supere los 250 litros, el consumo promedio bonaerense se ubica en 350 litros.
En el caso de La Plata, el derroche es todavía mayor, ya que el consumo promedio por habitante y por día ronda entre los 500 y los 600 litros. Con todo, la situación de nuestra ciudad es diferente, indican en Absa, porque a diferencia de los municipios más comprometidos en el tema, dispone de un elemento clave: la proximidad del Río de La Plata, que aporta aguas de superficie que, potabilizadas, representan el 50% del agua consumida en la región.
Con todo, también en nuestra Ciudad se recomienda reducir los excesivos consumos de agua para lograr bajar los hoy elevados costos de potabilización.

EN NECOCHEA
La situación es distinta en Necochea, donde la municipalidad decidió esta semana multar a vecinos y comerciantes que derrochen agua potable en el marco de la emergencia hídrica que fue declarada en ese partido bonaerense.
Según explicó a este diario el director de Obras Sanitarias de esa localidad, Guillermo Botella, Necochea obtiene el agua para consumo de napas subterráneas que registraron un fuerte descenso como consecuencia de la sequía que azota a la Provincia.
"Como consecuencia de eso hubo bombas de pozo profundo que se quemaron después de bobear aire y agua. A partir de eso el intendente firmó la última semana un decreto de emergencia hídrica que permite a los inspectores municipales multar el derroche de agua, pero en principio lo que se está haciendo en notificando y concientizando", dijo Botella.
A partir del decreto, los inspectores de tránsito de Necochea están facultados para multar a los vecinos que incurran en excesos, mientras otros cuatro inspectores trabajan exclusivamente en ese tipo de control. Pero, como el servicio del agua en esa localidad no es medido, la tarea de los inspectores se focaliza, por ahora, en dos prácticas a las que se trata de poner límite: el riego de parques y el lavado de autos y veredas.

EN TORNQUIST
Algo similar sucede en Tornquist, donde ya el verano pasado la crisis hídrica castigó duramente a Villa Ventana. Allí, esta semana, el Concejo Deliberante aprobó una ordenanza que autoriza sancionar a aquellas personas que derrochen agua potable en el marco de la crisis hídrica.
Según indicó a este diario Adrián Montoya, secretario de Obras Públicas de Tornquist, la decisión de aplicar multas al derroche se enmarca en un programa más amplio, que apunta a concientizar y educar. "La idea es estar prevenidos para evitar la falta de agua en el verano. Al principio va a haber avisos y notificaciones y sólo después multas. Y también vamos a reparar todas las pérdidas de la red municipal, para empezar dando el ejemplo".
La preocupación de Montoya -que también aparece en Necochea- es que el clima, cada vez más imprevisible, convierta a las sequías en un problema más frecuente y más riguroso en la zona.

Consejos para gastar menos
Para ilustrar que bastan algunas sencillas medidas para reducir considerablemente el consumo cotidiano de agua potable, en Tornquist, el secretario de Obras Públicas, Adrián Montoya, pone un ejemplo fácil de entender. Dice que lavándose los dientes a diario utilizando un vaso se gasta mucho menos que haciéndolo con la canilla abierta. En el segundo de los casos, el desperdicio es de 5 a 10 litros por minuto.
Como ésta, son varias las medidas que se recomienda tomar para reducir el consumo de agua, tanto desde los municipios que esta semana dictaron normas para controlar el derroche, como desde Absa.
Entre ellas, muchas se relacionan con la pronta llegada del verano y con el uso recreativo del agua potable.
Así, desde ABSA se recomienda llenar piletas en horario nocturno, usar productos necesarios para mantener el agua limpia en los natatorios el mayor tiempo posible y mantener la limpieza del agua en las piletas de lona para evitar la constante renovación.
Del mismo modo se recomienda evitar el riego de jardines durante el día, así como también el de calles de tierra, el lavado de vehículos y el de veredas y patios.
Otra de las medidas que se recomiendan es la de reemplazar el uso de mangueras en el lavado de un vehículo por el de baldes. Y en el caso de riego de jardines, reemplazar la manguera por regaderas.
Asimismo, se recomienda controlar las instalaciones internas que generen pérdidas, ya que aunque estas sean mínimas, en un contexto generalizado, pueden provocar una alteración en los niveles de presión.