En Huaycama, un grupo de vecinos ha comenzado las protestas públicas por la extracción de áridos en la zona, ya que consideraron que no sólo dañan el medio ambiente, sino que también destruyen el potencial turístico e histórico de esta zona ubicada en el departamento Valle Viejo.
Los vecinos temen por la extracción indiscriminada que se realiza en el río Santa Cruz y la falda del cerro Ancasti que da a esta localidad, no sólo por el peligro que representa extender el cauce del río y desviar el recorrido natural de los arroyos que descienden del cerro, sino también por la constante amenaza de que, cuando llueva, el agua y todo el material que quede suelto, producto de estas extracciones, se desvíe hacia el pueblo.
Los problemas de esta explotación son variados: desde la destrucción de caminos por los pesadísimos vehículos que transportan los materiales, dañando las vías de acceso al lugar, la tala indiscriminada de especies arbóreas autóctonas (quebracho colorado, algarrobo) para crear accesos a estos lugares, aparte del potencial turístico que no está siendo aprovechado y se encuentra pronto a desaparecer.
En Huaycama se encuentran las ruinas de la casa natal del caudillo Felipe Varela.
En una recorrida realizada por este diario, también se pudo observar el deplorable estado en que se encuentra el monumento al caudillo "portador de la cinta roja".
Y como si fuese poco, vecinos desaprensivos arrojan basura al cauce del río, en el monumento que recuerda al caudillo, al costado del camino. "En donde sea tiran basura; nosotros los tenemos que correr siempre”, asegura indignado un vecino de Huaycama. Tampoco el lugar cuenta con señalización y hay un trecho importante sin pavimentar entre esta localidad de Santa Cruz, por donde pasa el río.
Ya en 2006, la Cámara de Senadores aprobó un proyecto de resolución mediante el cual solicitó al Poder Ejecutivo provincial la construcción de un puente sobre el río Santa Cruz entre las localidades de Santa Cruz y Huaycama.
La obra, un vado sobre el río, según información suministrada por funcionarios de Obras Públicas, sería de bajo costo aunque “de una enorme solución para toda la comunidad de Huaycama".
Los vecinos también manifestaron su descontento ante el proyecto para la construcción de un Centro de Salud Mental en esa localidad, que en la actualidad se encuentra en la Dirección de Inversión Pública para lograr la aprobación técnica.
Éstas son algunas de las inquietudes de los vecinos de Huaycama, que no ven progreso en su comunidad, sino todo lo contrario. La falta de controles estatales consienten el despojo de un hábitat único, aparte de la carencia de políticas de Estado que permitan el desarrollo de un pueblo que sufre la emigración de sus habitantes hacia centros urbanos más poblados. De hecho el censo realizado por el INDEC en 1991 data que la población contaba con 186 habitantes, en tanto que el de 2001, 174, lo que representa un descenso del 6,45%.