Un equipo de 25 alumnos del Colegio San Jorge de la capital visitó la localidad de Colonia Gamara, en el departamento Banda para conocer en profundidad la problemática del hidroarsenicismo y halló en sus aguas un registro de 74 miligramos de arsénico por litro, lo que constituye un nivel muy elevado de contaminación. También llegaron hasta Gran Porvenir y La Granja.
En diálogo con EL LIBERAL, la Prof. Elinda Delgado y los alumnos Sofía Villarruel, Florencia Pancic, Matías Ponce Luna y Juan Sayago explicaron las características de la actividad que desarrollaron y los logros alcanzados.
Con relación a los fundamentos de la investigación Villarruel expresó: “Sabemos que el Hacre es una enfermedad producida por el consumo de agua con arsénico y el nivel aceptado es de 1 miligramo por litro”.
Sin embargo, luego de visitar la comunidad de Colonia Gamara “llevamos al laboratorio de Saneamiento Ambiental del Ministerio de Salud de la provincia la muestra de agua que habíamos tomado en dicho lugar y dio como resultado la presencia de 74 miligramos por litro”.
Se trató de un proyecto de investigación interdisciplinario puesto en marcha por el 5to. año de la modalidad Ciencias Naturales, denominado El hidro- arsesino, un dulce final, que tenía como objetivo localizar los lugares que sufren la contaminación de este recurso natural.
La estudiante añadió que los expertos de la dependencia sanitaria les explicaron todo lo relacionado con la problemática del arsénico, compartieron la experiencia y la información recolectada en los viajes.
Por su parte, la Prof. Elinda Delgado destacó la participación de los estudiantes en el desarrollo del proyecto que les fue de gran utilidad a las comunidades que visitaron. “Cuando arribaron los alumnos, los pobladores se reunían para escuchar la información de los chicos, fue una experiencia educativa muy enriquecedora”, dijo.

Realidad
Cabe recordar que el hidroarsenicismo endémico es una enfermedad grave de larga evolución que afecta a varias provincias de la Argentina, provocada por la presencia de aguas contaminadas con arsénico en amplias áreas de nuestro país y que ponen en riesgo a las comunidades de padecer enfermedades cardiovasculares, dermatológicas y oncológicas.
Más de un millón de argentinos están expuestos a padecer una enfermedad crónica capaz de desencadenar diferentes tipos de cáncer por beber agua con elevados niveles de arsénico.
El problema principal es que la presencia de arsénico en el agua pasa inadvertida si no se hacen los estudios correspondientes. Incluso, ni siquiera al hervir el agua se puede eliminar el tóxico.