El Servicio Departamental de Seguridad Alimentaria y Alerta Temprana (Sidesat) en la presente semana iniciará el trabajo de evaluación respecto de los daños que está provocando la ausencia de lluvias en los municipios de Cruz de Machacamarca y Salinas de Garci Mendoza, en las provincias Litoral y Ladislao Cabrera respectivamente.
La directora del Servicio departamental de Seguridad Alimentaria, Olivia Beizan Blacutt, manifestó que este trabajo tiene el fin de establecer las bases para la elaboración de un proyecto de cooperación a la población damnificada por la sequía.
Dijo que para este efecto se trabaja en coordinación con el Centro de Operaciones de Emergencia (COE) que integran Defensa Civil, el proyecto Sidesat, la Secretaría de Agricultura y Ganadería, la Secretaría de Medio Ambiente, Save The Children, Visión Mundial.
Añadió que en la presente semana se viajará a Salinas de Garci Mendoza para evaluar los problemas que confrontan los productores de quinua producto de la falta de riego para sus plantaciones.
Sostuvo que en esta oportunidad de practicará una nueva valoración de la sequía y las pérdidas, tomando en cuenta que en los últimos muchos comunarios regresaron a sus terrenos, para producir quinua.
Indicó que posteriormente, una comisión de técnicos visitará el Municipio de Cruz de Machacamarca viaje que será coordinado con los responsables del COE.
La situación de los municipios de Oruro es preocupante, debido a que las precipitaciones pluviales de los últimos días no fueron suficientes para el riego de los cultivos de hortalizas, papa, haba, arveja y otros característicos de la zona altiplánica.
La falta de lluvias provocaría que en los depósitos de agua, de los que se abastece la población de las distintas comunidades rurales y las capitales provinciales y municipales, no se almacene agua ni siquiera para el consumo humano.
En pasados días las autoridades del Municipio de Escara (Provincia Litoral del Departamento de Oruro) lanzaron una alerta debido a que el ganado camélido, principalmente y el ovino no tenía agua y que estaba en peligro de muerte, por la sequía que asola no sólo el Altiplano central, fenómeno que es advertido en otras regiones de Bolivia.
La población de los municipios, frente a esta situación piden al Gobierno pueda tomar una decisión respecto de la declaratoria de desastre natural que perjudicaría enormemente a los recursos.
Organizaciones no gubernamentales iniciaron campañas para concientizar a las personas a tomar en cuenta la situación y evitar el malgasto del agua, sin embargo existe municipios que se encuentran en áreas donde las precipitaciones pluviales son escasas y si la situación continúa invariable, el costo del desastre será significativo.
La acción que se busca establecer a través de la actividad del COE, tiene el propósito de hallar la manera de paliar las necesidades de los campesinos afectados por este cambio de comportamiento del medio ambiente