Como en una pesadilla, alrededor de 200 personas despertaron en la madrugada de ayer con el agua hasta la cintura en la localidad de Las Lajitas, en el departamento Anta.
Mientras la lluvia caía "a baldazos" y en pocos minutos la inundación alcanzaba el metro de altura, los pobladores apenas tuvieron tiempo para salvar sus vidas, perdiendo todas las pertenencias materiales.
Al parecer la causa del desastre habría sido el desborde de una de las represas ubicada en una finca de la zona. Con el correr de las horas unas 80 familias de los barrios Progreso, Milagro, San Antonio y del asentamiento del predio del ferrocarril, fueron trasladadas a la escuela Antártida Argentina.
En el operativo de rescate y evacuación trabajaron la Dirección de Vialidad de la Provincia, la Municipalidad, la Policía y los Bomberos. El intendente Alberto Fermani adjudicó la tragedia a las presencia de grandes extensiones de tierra desmontadas en los alrededores de la ciudad, en las que se produce soja. Según explicó el jefe comunal la falta de monte en los alrededores de la zona urbana impide que el suelo tenga suficiente capacidad de absorción de agua. También informó que por prevención de accidentes se mantuvo cortado el servicio de energía eléctrica en el sector afectado de la ciudad.

En el techo de la camioneta
El almacenero Santiago Maidana perdió elementos materiales por un valor cercano a los 50 mil pesos, según estimó ayer, luego de que cesara la tormenta que lo sorprendió en su domicilio ubicado en el sector "50 Viviendas" del barrio Milagro.
"Sentí el frío del agua cuando dormía. Desperté y ví que el nivel llegaba hasta mi cama y no tenía ni siquiera un celular a mano. Por suerte encontré una linterna que guardo en mi dormitorio y con esa ayuda logré sacar a mi familia a la calle", relató. También dijo: "Estuvimos en el techo de la camioneta hasta las cinco y media de la mañana, cuando comenzó a bajar el agua. Lo único que pude salvar es un televisor. Perdí las heladeras, toda la mercadería. El motor de mi camioneta está lleno de arenilla y agua. A grandes rasgos, calculo que fueron cerca de 50 mil pesos los que perdí.
El hombre no sabe cómo hará para volver a poner en funcionamiento su negocio. "Espero que desde el Estado me faciliten el acceso a un crédito, porque este almacén es la única fuente de ingresos", sostuvo. Al cierre de esta edición 50 personas seguían evacuadas