Santiago del Estero, Salta y Santa Fe, a través de sus representantes en el Comité de Cuenca Juramento-Salado, analizaron la situación de emergencia hídrica que se vivió en los últimos meses, y coincidieron en la necesidad de que desde Salta se mantenga la derivación de 16 a 18 metros cúbicos por segundo, y además, que se realicen mejoras en obras que pueden servir de reservorio de agua en épocas críticas como las vividas.
Del encuentro realizado ayer en la ciudad de Añatuya, cabecera del departamento Taboada, participaron el ingeniero Abel Tévez, secretario del Agua y el ingeniero Antonio Gallego, por Santiago del Estero, y el director provincial de Recursos Hídricos por Santa Fe, Pablo Storani, además de Oscar Din, por el gobierno de Salta.
También asistieron el doctor Darío Moreno, por el Ministerio del Interior, y Miguel Lozano, por la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Nación, además de una funcionaria del Ministerio de Agricultura nacional. Tras el encuentro, Tévez informó a Nuevo Diario que Santa Fe reconoció el esfuerzo que hizo Santiago en entregar agua en el marco de la emergencia hídrica, y coincidieron en la necesidad de seguir aforando el cauce a futuro.
Asimismo destacó el compromiso salteño de seguir erogando de 16 a 18 metros cúbicos por segundo en el límite interprovincial, para que una vez que se cumplan los 700 kilómetros de trayecto en suelo santiagueño, llegue a Santa Fe.
Además se habló de hacer las obras necesarias para mitigar la crisis, construyendo reservorios adicionales para abastecer a las poblaciones, aunque sin una gran inversión, sino refaccionando las obras existentes.
Tévez indicó que otro aspecto importante que alivió la situación en Tostado, además de las últimas lluvias, fue que Santiago sigue derivando 5,4 metros cúbicos por segundo, lo que permite que los volúmenes de agua enviados a Santa Fe sirvan para mermar los reclamos producidos en los últimos tiempos.
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