En el medio de un clima cada vez más enrarecido por la participación de algunos referentes políticos, se profundiza la polémica por la posible contaminación del canal Sur. Ayer se realizó una reunión entre funcionarios de las municipalidades de San Francisco y la ciudad santafesina de Frontera.
Al ingresar al edificio de la Municipalidad de Frontera se produjo un tumulto en el que hubo intercambio de improperios entre los vecinos autoconvocados y algunos funcionarios que se vieron desbordados por la presencia de los habitantes de la zona sur de las ciudades vecinas, quienes reclaman soluciones sobre la eventual contaminación del desagüe que lleva las aguas hacia la zona rural.
Más allá de este incidente, se confirmó que el próximo martes las autoridades de la Secretaría de Ambiente de Santa Fe recibirán a una delegación de vecinos y concejales de ambas ciudades. El encuentro está previsto para la mañana de ese día, en la capital santafesina y también fueron invitadas las autoridades de la Secretaría de Ambiente de Córdoba. El objetivo de la reunión será analizar los resultados obtenidos a partir del examen de las muestras de agua del canal que se efectuaron en el Ceprocor. Según trascendió, el gobierno santafesino tiene previsto realizar un mayor control sobre industrias y generadores de efluentes, así como la Empresa Provincial de la Energía controlará los transformadores para verificar si presentan pérdidas de PCB, el refrigerante que se emplea en ese tipo de elementos.
Además, el Estado santafesino se contactó con la empresa que construye la autovía Santa Fe - San Francisco, para reforzar las gestiones que por su lado encaró el intendente Martín Llaryora ante el gobierno de Córdoba, con la intención de que se haga el entubamiento del canal de desagües.