"Vamos a ver si llegamos a una negociación pacífica y podemos terminar esa concesión, de una manera que no lesione los fondos y el presupuesto de la provincia", dijo ayer el gobernador en una conversación con periodistas en la residencia oficial al ser consultado sobre la relación entre el Estado provincial y la concesionaria del servicio de Aguas de La Rioja.
El mandatario dijo que está en desacuerdo con las deudas que reclama la empresa y ratificó que el que siempre pone la plata para las obras es el Gobierno.
Al respecto dijo que desde su punto de vista no se le debe nada, a la empresa y confirmó que la firma pide en forma extraoficial entre 50 y 100 millones de pesos. "Pero el Estado es el que pone los fondos siempre, si sumamos los millones que puso la provincia durante todo el tiempo que tienen la concesión, ellos le tienen que dar plata a la provincia", disparó e indicó que "hay una comisión que continúa trabajando sobre el tema de la empresa prestataria del servicio de agua.
Asimismo el mandatario dijo que fue "una medida muy acertada haber intervenido el servicio, no a la empresa, por eso tenemos agua en la ciudad de La Rioja, en Chamical hicimos inversiones históricas para que tenga agua, en la Capital sólo quedan dos bombas de un total de más de quince que estaban paradas y el Estado realizó seis perforaciones acá y en Chilecito también".
Agregó también que "este fue un año de mucha sequía, es por eso que el Estado tuvo uno de los mayores gastos en este período, haciendo perforaciones, acueductos, comprando bombas, desalinizadores, plantas de ósmosis inversa, entre otros, la provincia destinó millones de pesos para que la población tenga agua, pero es algo que teníamos que hacer".