Dos personas murieron, una en La Rioja y la otra en Santo Tomé (Santa Fe), como consecuencia del temporal de lluvia y viento que afectó zonas del noroeste y centro del país el sábado. Además dejó centenares de heridos, voladura de techos y caída de árboles.
En la ciudad de La Rioja, el temporal de lluvia, viento y granizo duró unos pocos minutos. Hubo voladuras de techos y caída de árboles, carteles, postes y cables. Un hombre de 33 años, Enrique Nezman, intentó cubrir con una lona su viejo Rastrojero, en pleno vendaval, en el barrio Juan Melis, con tan mala fortuna que un gran paraíso cayó encima de él y del vehículo. Nezman, oriundo de Tucumán, pero afincado en La Rioja en el barrio Islas Malvinas y empleado en la fábrica Puma, murió cuando era trasladado al hospital regional Enrique Vera Barros. Un menor que lo acompañaba en la tarea de cubrir el auto sufrió heridas graves y permanece internado.
En algunos sectores de la ciudad el viento superó los 60 kilómetros por hora y el granizo fue de gran tamaño, lo que provocó roturas de vidrios y daños en la carrocería de decenas de automóviles.
En virtud de la atención que requerían numerosas personas, hasta tuvo que ser habilitado de emergencia el Centro de Salud de la policía de la provincia, en el populoso sector sur de La Rioja uno de los sectores más castigados, donde un automóvil volcó cuando su conductor intentaba, en medio de la tormenta, esquivar un profundo pozo sin señalizar.
En Santa Fe, en tanto, un joven de 24 años murió por una descarga eléctrica ocasionada tras los destrozos que dejó el temporal en la ciudad y alrededores. La tormenta llegó a tener vientos del sur de 80 km/h. Hubo árboles caídos y calles anegadas.
El hecho fatal tuvo lugar en la ciudad de Santo Tomé, cuando Ricardo Alberto Barneche tomó contacto con un cable cortado al intentar cruzar un zanjón.
En tanto, en Monte Vera, Carlos Rojas sufrió la misma descarga producto de la caída del cableado y salvó su vida de milagro. Con algunos politraumatismos fue derivado al hospital José María Cullen.
En Santa Fe y alrededores fueron más de cien los árboles caídos, además de gran cantidad de carteles comerciales destrozados. El temporal que azotó a la ciudad durante la tarde del sábado y la madrugada de ayer, tuvo una lluvia que en algunos sectores superó los 62 milímetros, provocando el anegamiento de calles.
En San Luis la tormenta provocó el anegamiento de casas y la evacuación de 20 personas.