Miles de solicitudes de aprovechamiento de derechos de agua subterráneas, entre las regiones de Arica-Parinacota y O’Higgins, correspondientes a usuarios industriales, mineros, agrícolas y especuladores serán rechazadas.
Esto en virtud de la aprobación en el Congreso de un proyecto de ley que deroga una de las modificaciones transitorias del Código de Aguas, vigente desde 2005, que si bien facultó a la Dirección General de Aguas (DGA) para regularizar obras de captación de agua de reducido volumen de pequeños agricultores y comunidades indígenas, fue aprovechada por usuarios mayores.
De esta forma, el gobierno intenta bloquear una medida que, según indicó el ministro de Obras Públicas (MOP), Sergio Bitar, al final del trámite de la iniciativa, “provocaría un desastre” entre estas regiones.
La preocupación del gobierno obedecía a que en virtud de este período excepcional, que comenzó en 2005, el órgano dependiente del MOP recibió nada menos que 55 mil solicitudes, gran parte de ellas -dijeron en la repartición- “relacionadas con operadores mineros, industriales, grandes agrícolas, parcelas de agrado, especuladores y negociantes de derechos de agua, entre otros”.
De este total, anunciaron en el gobierno, más de 40 mil serán rechazadas en virtud de la ley que está en condiciones de ser promulgada.

Efecto contundente
“Impedimos un desastre. Si se hubiera mantenido la ley vigente desde 2005, se habría tenido que otorgar derechos de agua en una cantidad gigantesca de cuencas, desde Arica hasta la Región de O´Higgins, zonas en las que este recurso no está disponible y que, en consecuencia, se habría agravado la situación de los acuíferos y los derechos de agua se habrían transformado en derechos de papel”.
Los registros públicos son contundentes, pues del total de regularizaciones recibidas a partir de esta “ley del mono hídrica”, no más de 15 mil correspondían a regularizaciones de pozos y norias de pequeños agricultores, comunidades indígenas y sistemas de agua potable rural construidos antes de junio de 2006, que son los que se buscaba proteger por esta vía.
El caudal asociado al 100% de las solicitudes ascendía a 150 metros cúbicos por segundo (m3/seg) y para tener una referencia de la magnitud de este volumen, el abastecimiento de toda la ciudad de Santiago alcanza a 15 m3/seg.
En el MOP indicaron que algunas de las solicitudes de gran tamaño que aprovecharon la ventana legal que abrió el Código de Aguas lograron regularizar su situación. Entre ellas figuran empresas ligadas al empresario Francisco Javier Errázuriz.
En el MOP adelantaron que el “rechazo masivo” de las solicitudes será procesado durante todo 2010, sólo quedarán exceptuados quienes se ajusten a los requisitos fijados en el texto actual, que establece la constitución de derechos de aprovechamiento permanentes sobre aguas subterráneas por un caudal de hasta 2 litros por segundo, entre las regiones de Arica-Parinacota y Metropolitana, y hasta 4 lt./s en el resto de las regiones.