(25 de Mayo) - Varias familias de puesteros se reunieron el domingo con el intendente David Bravo y otros funcionarios municipales de esta localidad. Compartieron un almuerzo en el puesto de Onésimo Llantén, en la costa del lago Casa de Piedra a unos 45 kilómetros de 25 de Mayo, y analizaron la difícil situación que viven por la larga sequía que ha generado gran mortandad de animales.
En 2009 el municipio aportó más de medio millón de pesos como subsidio para la compra de pasto y alimento balanceado para detener la mortandad de animales, estimada en unas diez mil cabezas sólo de vacunos.
Preocupación.
Los puesteros no solicitaron nada expresamente, aunque manifestaron su preocupación porque aún no llegaron las lluvias que, en caso de producirse en lo inmediato, el grave daño producido en los campos demandaría unos tres años en normalizarse, dijeron.
Desde el Gobierno municipal se dejó entrever que continuarán acompañando a los crianceros en esta crisis, aunque también se espera que se pueda producir pasturas en sectores bajos, de acuerdo a lo propuesto en su momento por algún organismo gubernamental.
Los hombres de campo agradecieron la presencia de las autoridades comunales, a quienes les dijeron que era la primera vez que funcionarios iban a sus campos a escucharlos. "Siempre hemos tenido que ir nosotros al pueblo para participar de reuniones y hacer las propuestas", apuntaron.