Si el pasado viernes un impresionante diluvio se ensañó con el noroeste de la ciudad de Córdoba y alrededores, ayer fue el sur de la Capital la zona que sufrió los embates de una nueva lluvia. Los poco más de 50 milímetros, caídos en un corto lapso, provocaron correntadas de agua que inundaron calles y avenidas y numerosas viviendas, y arrastraron automóviles en distintos puntos de las zonas sur y centro.
El caso más grave sucedió en barrio Jardín, donde un chico de 13 años recibió una descarga eléctrica y se encontraba internado con pronóstico reservado en una clínica privada.
La falta de infraestructura y el pésimo estado de los desagües, sumados a que se desbordó el Canal Sur (también lo hizo el Norte), convirtieron cientos de calles en verdaderos ríos. Hubo personas evacuadas en Villa Unión.
Como si el panorama no fuera crítico, se sumó otro elemento: la falta de remises y taxis y la ausencia de colectivos; en parte por el paro dispuesto por la falta de seguridad y también porque las calles estaban inundadas. Encima, miles de cordobeses que ayer se habían volcado al centro para hacer sus compras navideñas quedaron a pie, ya que no tenían forma de volver a sus hogares. Algunos vecinos llegaron a iniciar una improvisada protesta en el centro, precisamente por la falta de transporte.
La Clínica Junín se vio parcialmente inundada.
Calles convertidas en ríos. Las principales zonas afectadas fueron: Centro, Alberdi, Alto Alberdi, Residencial Santa Ana, Quintas de Santa Ana, Los Plátanos, Mafekín, Ameghino, Jardín, Parque Capital y otros puntos como Nueva Córdoba, la bajada Pucará y zonas más alejadas como Villa Unión o SEP. El aguacero también causó complicaciones en el norte de la ciudad y en Guiñazú.
Las calles se volvieron ríos en varios puntos. En Caseros y Urrutia, la correntada se llevó varios autos, que terminaron con destrozos. Adrián Romero contó que tuvo salir de su vehículo cuando el agua llegó al volante. "Íbamos con mi mujer y mi hija por 27 de Abril y el agua nos empezó a arrastrar. Tuvimos que salir del auto y subirnos a un árbol. Mi hija se asustó mucho", dijo, pero nadie sufrió heridas. Metros más abajo, un taxista y sus pasajeros fueron arrastrados por la correntada cuando se bajaron del vehículo. Fueron socorridos por un móvil policial.
Un muro del Colegio Deán Funes, en Nueva Córdoba, se cayó sobre un auto.
En Jesús María hubo evacuados en barrio Tiro Federal.
Zonas afectadas
Prometen lagunas de contención
La Provincia y las municipalidades de Córdoba y Villa Allende realizarán relevamiento conjunto para la construcción de lagunas de retención en la cuenca noroeste de la ciudad de Córdoba, una de las zonas de la ciudad que resulta fuertemente afectada cuando llueve.
Según se informó oficialmente, las lagunas de retención abarcarán a las localidades de Villa Allende, Mendiolaza, Unquillo y Río Ceballos, que el viernes pasado sufrieron graves anegamientos durante la fuerte tormenta que afectó a gran parte de Córdoba. Las tareas de relevamiento serán coordinadas por el Ministerio de Obras y Servicios Públicos de la Provincia, el Instituto de Planificación del Área Metropolitana (Iplam) y las municipalidades de Córdoba y Villa Allende.
Se espera que, con las obras que se realicen, se eviten situaciones límite como la que provocó el anegamiento de numerosos barrios.
Canal Maestro
El Gobierno provincial informó que continúan las tareas de limpieza en el Canal Maestro Norte, por la basura que resultó arrastrada durante las últimas lluvias.