"Estalló" el verano con temperaturas superiores a los treinta grados, y los vecinos de numerosos barrios platenses empiezan a preguntarse cómo responderán las redes de agua corriente ante la persistencia de las marcas térmicas elevadas. En la empresa Aguas Bonaerenses admiten que el sistema está funcionando "al límite", y apelan a un "uso solidario" de los recursos disponibles, pero aclaran que está en marcha un amplio plan de obras que permitirá optimizarlos y mejorar el servicio.
Durante la semana que pasó, los reclamos por baja presión y corte de suministro del líquido vital empezaron a dibujar una curva ascendente, como es habitual a esta altura del año. En Los Hornos, Altos de San Lorenzo, Villa Castells, San Carlos y el sur del casco urbano, se escucharon quejas por tanques que nunca se llenan -y sólo se recargan durante las madrugadas-, extensos lapsos con canillas totalmente secas, y electrodomésticos que funcionan en falso. Episodios que trastornan la vida cotidiana y obligan a realizar movidas que insumen tiempo y dinero.
En ABSA creen que es necesario reducir el consumo "per cápita" de agua que se registra en el Gran La Plata, calificado como "excesivo". La planta potabilizadora Donato Gerardi -ubicada en Punta Lara-, que toma del Río de La Plata aproximadamente la mitad del agua demandada por la Región, está trabajando al tope de su capacidad para abastecer barrios en permanente expansión geográfica y demográfica. Y las perforaciones que aportan la otra mitad desde los acuíferos subterráneos, están disminuyendo su producción paulatinamente. "Las napas están bajando de una manera notoria" se advierte, "y el caudal que se puede extraer de cada pozo es cada vez menor".
Los parámetros establecidos por organismos internacionales definen como razonable un consumo diario por persona 80 a 125 litros; la Organización Mundial de la Salud "estira" el límite hasta los 250 litros. En ABSA afirman que la Ciudad demanda 350 millones de litros de agua cada 24 horas, lo que equivale a 600 o 700 litros por habitante.

PLAN DE OBRAS
En este contexto, la empresa que abastece de agua potable a la Región encaró este año un "Plan Integral de Obras de Refuerzo y Extensión del Servicio", que continuará en 2010. Entre los trabajos realizados, se citó el reemplazo de más de veinte mil metros de caños fundacionales de hierro fundido -de 75 milímetros de diámetro- por tuberías modernas de polietileno de alta densidad -de 90 mm-; y la perforación de una decena de pozos nuevos en barrios periféricos al casco histórico (Tolosa, Los Hornos, Villa Alba, Villa Montoro, Barrio Aeropuerto, Villa Elisa, Gonnet, Villa Castells, José Hernández, Altos de San Lorenzo y Monasterio).
El programa incluye una puesta en valor de la planta de Punta Lara; el montaje de bombas en las estaciones Bosque y San Martín; y dos cañerías de impulsión, una en Ensenada y otra en La Plata -con cisterna de 5 mil metros cúbicos incluida-.

CONSEJOS PARA AHORRAR
Con el objetivo de promover un uso "responsable, solidario y cuidadoso" de los recursos durante el verano, "evitando el derroche" y generando "una nueva cultura del agua", Aguas Bonaerenses recomienda realizar el llenado de piletas en horario nocturno; mantener el agua limpia en los natatorios "el mayor tiempo posible"; evitar la "constante renovación" del agua en piletas de lona; no conectar bombas succionadoras a la red; evitar el riego de jardines y calles de tierra durante el día, el lavado de vehículos, veredas y patios; reemplazar el uso de mangueras por baldes; y controlar las instalaciones internas que generen pérdidas.

PILETAS
Aguas Bonaerenses recomienda realizar el llenado de piletas en horario nocturno; mantener el agua limpia en los natatorios "el mayor tiempo posible"; evitar la "constante renovación" del agua en piletas de lona, y no conectar bombas succionadoras a la red.