En el plazo de un año debería estar saneado el Arroyo Calafate, si es que se cumple el acta de compromiso que firmó el intendente local Javier Belloni y el Secretario de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, Homero Bibiloni.
El documento fue firmado en el acto del 7 de diciembre, y contempla la financiación del gobierno nacional para el saneamiento del arroyo que debe realizar el municipio local. Para ello, Nación enviará más de 1.800.000 pesos, según indica el sitio Ahora Calafate.
Se trata del “Plan Integral para el Saneamiento del Arroyo Calafate, Provincia de Santa Cruz, y cuerpos de agua asociados a su subcuenca”.
El convenio dice que el municipio tiene a su cargo la implementación de las obras a realizar, pudiendo contratar servicios de terceros.

LOS FONDOS
1.830.860 pesos es la suma que demandará el plan, y que destinará Nación. El convenio al que accedió "Ahora Calafate" estipula que 915.430 llegarán al municipio como parte de un primer pago que debería concretarse antes de fin de año. Esa suma deberá ser afectada a gastos operativos y compra de equipamiento.
Los 915.430 restantes serán enviados en cuatro cuotas de 228.857,50 pesos cada una, las que serán pagadas a final de cuatro trimestres.
Para que el municipio reciba los pagos sucesivos, debe presentar certificados de avances de los trabajos.

OBJETIVOS
La finalidad es la realización del plan que haga a la “restauración” del arroyo recuperando la calidad de las aguas.
Según el plan, esa recuperación se hará mediante la proyección de las medidas de depuración del arroyo, para ello se hará uso de la capacidad de auto depuración del curso, e incrementarlo. Una idea que debe ir de la mano con “la ejecución de la ampliación de las redes cloacales y planta de tratamiento que realizará la provincia de Santa Cruz”, según dice el mismo convenio.
Los trabajos también consistirán en la recuperación del ecosistema asociado al arroyo, recomponiendo la diversidad de la flora y fauna regional.
“Dicha restauración generará una revalorización socio-cultural y económica de los paisajes de agua. Mediante esta revalorización se tendrá como objetivo el acercamiento de la población urbana (permanente y turística) al arroyo y al ecosistema asociado. En esta perspectiva es que se construirá un paseo ribereño que armonice con el entorno, de modo tal que favorezca la participación de la población en forma activa, tanto el desarrollo del proyecto como en su implementación, mantenimiento y seguimiento. Para ello es que se deberá instrumentar los mecanismos necesarios que permitan dicha participación”, dice un tramo del texto del convenio.
Parte de los trabajos se basarán en un informe elaborado en el 2003 por el Instituto Nacional del Agua, utilizándose técnicas como escollera de rocas o palizadas de troncos en los taludes del cauce, lo que facilitará el crecimiento de la vegetación. Construcción de deflectores de troncos, que funcionarán como refugio y punto de desove para los peces y favorecerá el desarrollo de pequeños meandros.
La implementación de drenajes de troncos en los puntos de desagües de aguas residuales, los step-pool de rocas y troncos para generar variaciones longitudinales del curso y la aparición de pequeños saltos de agua que favorecerán la oxigenación del medio, y la plantación de árboles, arbustos, herbáceas y plantas ornamentales nativos en las riberas, son otras de las acciones contempladas, además de la poda y raleo de plantas y árboles en mal estado.

PASEO RIBEREÑO
La construcción de un paseo ribereño necesita de un diseño que el convenio dice que debe ser consensuado con la comunidad. La idea es que cuente con una amplia variedad de especies vegetales autóctonas y que esos lugares cuenten con todo el equipamiento necesario “para el esparcimiento de visitantes de cualquier edad (zona de descanso, juegos infantiles, bici sendas, miradores, fuentes, bebederos, baños públicos, etc.) y para la disposición adecuada de todos los residuos que pudieren generarse en su recorrido”.

LIMPIEZA DEL CAUCE Y MÁRGENES
El convenio prevé que se haga un desmalezamiento con el equipo de máquinas, herramientas, indumentaria y mano de obra adecuada. “El objetivo final de los trabajos deberá dar al área un aspecto de “Parque”, dice el documento conocido por periodistas de este medio.
Para la finalidad deberá hacerse retiro de toda la basura gruesa, montículos de tierra y/o escombros, objetos voluminosos y todo otro elemento que se encuentre en el área ya sea agrupada o diseminadas, así también como al descubierto o tapada por la maleza. También desmalezado periódico y corte, procurando no arrancar las especies cespitosas que dominan el área. Rastrillado, luego del corte, acopiado y embolsando lo producido, para luego llevarlo al sitio de disposición final.
También se prevé un control de roedores y vectores del área de márgenes con los métodos adecuados de desratización y desinsectación.