A las fuertes lluvias que se registran en las últimas semanas en gran parte de la provincia de Buenos Aires, el sur santafesino y el sur cordobés, se sumó ayer caída de granizo, lo que generó mayores inconvenientes en los campos cultivados con la cosecha gruesa.
Unas 6.000 hectáreas fueron afectadas ayer por la caída de granizo en las localidades santafesinas de Armstrong, Cruz Alta, Villa Eloísa, Cañada de Gómez y Arequito. La mayoría de los lotes más dañados estaban sembrados con soja, mientras unos pocos eran de maíz.
Según un informe del GEA de la Bolsa de Comercio de Rosario, como la soja afectada “está transitando la etapa de floración, hubo una pérdida casi completa del área foliar, quedando en pie sólo los tallos, también afectados”.
“Los niveles de daño son variables y van desde un 30% a un 95 %, según el caso para los campos con soja”, dijeron especialistas.
En cuanto al maíz, se estima que los daños serían menores, ya que “están en etapa de llenado de granos y la planta tiene mayor resistencia al granizo”.
Respecto de las inundaciones en la zona de San Antonio de Areco, los ingenieros agrónomos del GEA indicaron que en noviembre se acumularon lluvias por 260 milímetros y en diciembre otros 180 mm. Con esas abundantes lluvias determinan, se consideró que los lotes recientemente implantados con soja, en sectores bajos, deberán resembrarse si las condiciones lo permiten.