Asunción, la capital del país, es la única ciudad importante de América que no cuenta hasta ahora con una planta de tratamiento de desechos cloacales, aún en pleno siglo XXI.
El hecho se debe a la corrupción imperante en los gobiernos de turno y en la Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguaya (Essap), propiedad del Estado y responsable del alcantarillado sanitario.
Los datos dan cuenta de que en febrero de 2005, cuando la Essap llevaba aún la denominación de Corporación de Obras Sanitarias (Corposana), el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), más conocido como Banco Mundial (BM), le otorgó un préstamo de US$ 80 millones para la construcción del alcantarillado sanitario, así como para la construcción de la planta de tratamiento en la capital y en otras ciudades del interior.
Los documentos revelan que hicieron todos los estudios para la construcción de la planta, pero que la obra nunca se ejecutó. Peor aún, US$ 12 millones del préstamo fueron a parar en la famosa Secretaría de la Reforma, bajo la administración de Juan Ernesto Villamayor. Al frente de la ex Corposana estaba Carlos Antonio López.
El proyecto concluyó en el 2002, pero a medias. Apenas emplazaron los caños y construyeron el túnel de la Avda. Primer Presidente, con lo cual los deshechos cloacales siguieron descargándose en el río Paraguay.
He aquí la explicación de la presencia de alto porcentaje de coliformes fecales en la mayoría de las playas ubicadas en la ribera del río.
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En el 2005, Víctor Bernal, director de Itaipú y el entonces intendente de Asunción, Enrique Riera, firmaron un acuerdo para la construcción de varias plantas de tratamientos cloacales, con un desembolso de poco más de G. 1.300 millones.
Una de las obras fue construida en el predio de la Comisaría 15, pero quedó inconclusa porque -según explicaciones del actual director de Obras de la Municipalidad de Asunción, y responsable de la construcción, Germán Fleitas Bogarín- la obra llegó hasta ahí, porque se le había acabado la plata a la Comuna.
La actual administración de Essap consiguió hace poco un crédito de US$ 50 millones del Banco Mundial y planea destinar una parte a la construcción de una planta de tratamiento de residuos. |
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