Los exámenes de agua de playa Jacó revelan alta contaminación. ¿ Ha retrocedido?
Si la gente va a nadar a la playa no tiene problema. Pero los ríos que dan al mar sí están contaminados, ese problema persiste. Debe existir señalización donde se indique a la gente que no se pueden bañar ahí.
El reglamento de Vertidos y Rehuso de Aguas Residuales tiene un vacío. A las plantas de tratamiento no se les exige la desinfección (con cloro) del líquido que va al río. Por eso va contaminada con coliformes fecales.
¿Cómo se puede corregir?
El Ministerio de Salud debe corregirlo. Ya lo manifesté ante la Ministra y está en revisión.
¿Cuánta responsabilidad tienen las plantas de tratamiento en esa contaminación?
Por lo menos un 50%. La otra mitad tiene que ver con contaminación dispersa como correntías de ganado y aguas residuales de viviendas que no se sabe de dónde vienen.
¿Cuándo le toca un nuevo examen a Jacó?
Le hacemos cuatro al año. Desde el 2008 planteamos un convenio con la Municipalidad de Garabito para hacerles, al menos, seis controles de playa y afluentes, al año. Aunque el costo no sumaba ni medio millón al año, no lo firmó. El alcalde de Garabito, Marvin Elizondo, dijo posteriormente que no firmaron por falta de recursos pero que este año presupuestaron ¢5,5 millones para ese fin y la limpieza de la playa.