El final de la concesión de Aguas de La Rioja tiene como trasfondo una polémica: ¿Funcionaron correctamente los controles estatales sobre la empresa privada?
Desde la oposición y hasta algunos dirigentes del oficialismo se animaron a cuestionar duramente al Ente Único de Control de las Privatizadas (EUCOP.
El reclamo principal estuvo relacionado con plantear cómo se llegó a una situación tan grave que provocara la rescisión del vínculo legal y qué papel tuvieron los controles estatales durante todo este periodo de concesión. "Yo se los anticipé en el 2002, cuando era diputado provincial", advirtió el actual legislador nacional por el radicalismo, Julio Martínez.

Respuesta
Quien salió a responder fue el titular del organismo, Félix Moya, quien en declaraciones a NUEVA RIOJA, afirmó: "Gracias a los controles que se realizaron se pudo rescindir el contrato de concesión. Fuimos nosotros los que recomendamos rescindir el contrato", recordó.
Moya puntualizó que su gestión fue la que se hizo cargo de controlar a la empresa, pero admitió que no podía responder por lo que había sucedido en los años anteriores.