A partir de un convenio que celebrarán en pocos días más el Ministerio de Ciencia y Tecnología de Córdoba y la Secretaría homónima de la Nación, se pondrá en marcha una investigación de campo en todo el territorio provincial, con el objeto de detectar nuevas reservas acuíferas y arbitrar, en forma paralela, medidas tendientes a asegurar un uso racional de las aguas subterráneas y del suelo en general.
“Este trabajo técnico, que se extenderá durante dos años, sumará a más de 160 investigadores de todas las Universidades de Córdoba, quienes colaborarán en la ejecución de dos proyectos de suma importancia para el destino de la provincia. También trabajaremos con la Subsecretaría de Recursos Hídricos, la Secretaría de Ambiente y el Ministerio de Agricultura y Ganadería de Córdoba. Pretendemos con este plan conocer cuál es la realidad actual en lo que respecta a las reservas acuíferas y al uso que se le da al suelo”, explicó a LA MAÑANA el ministro de Ciencia y Tecnología, Tulio Del Bono.
Las dos investigaciones se realizarán en forma paralela y se financiarán en partes iguales (un tercio en cada caso) con recursos del Estado nacional, la Provincia y las Universidades, que aportarán el personal técnico capacitado para la tarea de campo. En principio se maneja un presupuesto del orden de los 3 millones de pesos.
“Los datos que se obtengan con el relevamiento territorial y con imágenes satelitales nos permitirán obtener información de base clave para definir un plan estratégico integral de manejo de los recursos hídricos subterráneos y del suelo cordobés”, continuó el colaborador de Juan Schiaretti.
Las Universidades privadas y estatales de Córdoba aportarán geólogos, ingenieros agrimensores e ingenieros agrónomos para esta tarea de campo. En forma paralela, se adquirirán fotos satelitales.
“Este trabajo nos permitirá saber con qué recursos hídricos subterráneos contamos, en qué estado se encuentran, cuántas perforaciones se están explotando y hasta dónde se pueden utilizar. Hay que tener en cuenta que existen reservas acuíferas que están estancadas o agotadas y otras que se renuevan periódicamente”, precisó Del Bono.