En el encuentro se planificó evaluar regularmente el cumplimiento de los objetivos propuestos, tanto en materia de inversión como en cantidad de obras planificadas para el año en curso. Actualmente, existen en marcha y planificadas 200 obras de arquitectura, 80 de saneamiento y potabilización, 50 hidráulicas, más de 4.000 viviendas, 100 de mejoramiento urbano, 40 de energía, 30 viales con 150 kilómetros nuevos de pavimento y más de 300 trabajos menores, todo a ejecutarse en 2010.
Siguiendo las directrices estratégicas impartidas por el gobernador Sergio Urribarri, y de conformidad con los lineamientos conceptuales del Plan Estratégico de Infraestructura, los principales funcionarios responsables de la diagramación y ejecución de la obra pública evaluaron lo realizado durante el primer bienio de la gestión. Además consensuaron acciones para alcanzar los objetivos propuestos para el año en curso.
Desde las diferentes áreas se coincidió en destacar que la inversión que se viene realizando en materia de obra pública marca un hito histórico provincial en materia de infraestructura, sin precedentes. Esto, a la vez que constituye un pilar del desarrollo de la región, repercute en la inclusión social de los sectores más vulnerables, así como en la creación de puestos de empleo, en forma directa e indirecta.
La reunión contó con la presencia del secretario de Energía, Raúl Arroyo; el presidente del Instituto Autárquico de Planeamiento y Vivienda (IAPV), Julio César Aldáz; los directores de Hidráulica, Sergio Fontana, de Obras Sanitarias, Hugo Righelato, de Arquitectura, Oscar Marelli; del Ente de Control y Regulación de Telecomunicaciones, Oscar Palleiro, y de Planificación, Luz Goldman. También participaron el presidente del Ente Provincial Regulador de la Energía (EPRE), Francisco Taibi, Y el Ingeniero en Jefe de Vialidad Provincial, Guillermo Van Opstal, entre otros funcionarios vinculados al área.
En estas reuniones, que tienen un carácter periódico, se aplica la metodología establecida por el gobernador para desarrollar su gestión de gobierno. Las mismas sirven para fortalecer la articulación necesaria de las áreas en la ejecución de las obras, favoreciendo sustancialmente la eficiencia de la intervención pública para lograr una mejor calidad de vida.
En este sentido, se revaloró la inversión en infraestructura como palanca de un proceso de transformación provincial, vinculada a ser el soporte de la producción, generadora de fuentes de trabajo digno y una eficaz herramienta en la mejora de las condiciones sanitarias y educativas.