Pese a que las intensas lluvias se calmaron, en la región continúa el reclamo de gran cantidad de vecinos por las inundaciones sufridas, sobre todo en Almirante Brown. Los residentes del barrio La Cumbre, de la localidad de Burzaco, habían cortado el tránsito de Camino de Cintura el miércoles, a la altura de la calle Prieto, y ayer reiteraron la medida porque aseguran que las autoridades comunales no escucharon su reclamo.
La tormenta de hace dos días los afecto, tal como les había ocurrido en vísperas de Navidad, por eso exigen soluciones inmediatas, sobre todo ante las pérdidas materiales que sufren cada vez que las inclemencias del tiempo, y la desidia municipal, los afecta.
“Tuvimos que volver a cortar Camino de Cintura porque no queremos vivir de esta manera, necesitamos que las autoridades comunales del distrito le pongan fin a este problema que nos aqueja y perjudica muchísimo”, afirmó Esther Weiss, vecina del barrio, ante la consulta de Info Región.
Los vecinos sufren “desde muchos años” el mismo problema, del cual “nunca” recibieron respuesta.
“Con la lluvia de esta semana tuvimos el agua por completo adentro de nuestras casas y perdimos un montón de muebles que se resquebrajaron por el agua que entró, cosas muy costosas para nosotros, como heladeras, lavarropas, entre otras cosas. Ahora nos preguntamos quién nos va a reparar esto”, resaltó Esther.
Los vecinos admitieron que “personal municipal” se acercó ante su queja, y pronunciaron “algunas promesas de respuestas”, pero en concreto aún no se pusieron en marcha trabajos para ponerle fin a la preocupación vecinal. Así, quemaron otra vez neumáticos y evitaron que el tránsito circule.
“Nos prometen cosas y nos las cumplen, le pedimos al intendente (Darío Giustozzi) que venga y se moje los pies con los vecinos y que nos brinde soluciones”, volvieron a reclamar.
Y agregaron que ya están “cansados de reclamar por soluciones y que no haya respuestas”.
“No es la primera vez que sufrimos inundaciones; el 24 de diciembre pasamos las fiestas bajo el agua y nadie hizo nada, y después en enero ocurrió lo mismo”, relató Claudia Gutiérrez, que vive a pocas cuadras de la Ruta 4.
En este marco, resaltaron que “nadie se acercó a ayudarlos, sólo recibieron “puras promesas” y es por esto que se sienten “desamparados ante el temor de que la situación se complique más con el paso del tiempo”.
“Además, estamos rodeados de plantas industriales que colaboran a que haya desnivel de suelo, que produce la acumulación de agua en toda la cuadra cada vez que llueve, hecho que nos preocupa profundamente”, coincidieron.
El reclamo se repitió dos veces esta semana, y ya advirtieron que si vuelven a pasar por la misma situación volverán a cortar el tránsito para ser escuchados “de una vez por todas”.
|
|
|