Unos metros de arena aún quedaban fuera del alcance de la creciente ayer, aunque la orilla se había corrido tanto que casi tocaba la plataforma de madera, ubicada frente al río, del parador del balneario El Thompson de Paraná.
En realidad, el lugar se observaba con menos superficie a salvo del agua, en relación a días anteriores. Por ejemplo, una especie de gran laguna formada en el centro del complejo, ya estaba prácticamente a las puertas de la edificación donde están los sanitarios y funcionaban oficinas municipales. En tanto, el sector de los juegos infantiles y de un grupo de parrillas había quedado en el medio del agua
También parecía haber aumentado el nivel sobre la hilera de casas, situadas al este, cerca del arroyo Las Viejas.
Ante ese panorama, el intendente José Carlos Halle resolvió –tras una visita al lugar- clausurar el acceso de la playa, la única que permanecía abierta luego del cierre del balneario Municipal dispuesto hace unos días.
“Es por prevención”, explicó a EL DIARIO la directora general de Balnearios y Campamentos, Amalia Ferreira, en relación a la disposición tomada ayer. Es que, dijo, que el arroyo está desbordado y hay sectores donde no se sabe si es calle o es cauce y hay lugares inundados: “El agua se filtra por todos lados”, ilustró.
Una vez adoptada la medida de clausura, la funcionaria informó que se retiró el bollado y se colocaron señalizaciones avisando que la playa estaba inhabilitada. Efectivamente, esta Hoja observó un cartel, emplazado en el sector este del balneario. Justo en esa zona, una decena de personas se bañaba en las últimas luces de la tarde.
SIN BAÑOS NI OFICINAS. El grupo de sanitarios del complejo Thompson fueron cerrados y las oficinas de la Dirección de Campamentos y Balnearios debió ser trasladada al edificio donde funciona Turismo municipal, en la Costanera. “La oficina está con agua” y hay filtraciones también en los baños, explicó la directora. De todas maneras, aclaró que queda una guardia de guardavidas y que el acceso al camping queda abierto.
Ayer, había gente que porfiaba por desplegar los sillones y, con el mate a cuesta, quedarse en el sector de la arena. Otros caminaban con el agua casi a la rodilla, por la calle que corría paralela al arroyo y concluía en el río, y se unían a un grupo grande de adultos y niños que pescaban, parecía, que en cualquier parte.
Ferreira aclaró que se continuará cortando el pasto y juntando la basura, aunque apuntó que con la crecida se vuelve dificultoso juntar los plásticos que trae el curso del arroyo. A la vez, puntualizó, que el cierre de la playa obedece también a la necesidad de resguarda la integridad física de los visitantes -pues con el agua llegan camalotes y con ellos, alimañas- y las condiciones sanitarias. Al respecto, y ante la consulta sobre la rebasamiento de líquidos cloacales en la zona –situación advertida por vecinos en una nota publicada en estas páginas–, la funcionaria aseguró que “hasta el último día” el estado fue controlado y estaba en condiciones.
PARA ARRIBA. En avance del agua también se notaba ayer en la Costanera de Paraná. En la parte nueva, se podían tocar a través de las barandas las plantas acuáticas y la altura del agua parecía distar a menos de un metro del borde inferior de la estructura de cemento. Siguiendo la recorrida, el panorama se completaba con sitios colmados de agua a lo largo de la Costanera vieja.
Con la orilla cerca de las casas
JESÚS NÚÑEZ, titular de Defensa Civil Municipal, dijo a EL DIARIO que se trabaja para “mantener secas las casas (ubicadas en los sectores de la costa)”, aunque aclaró que todavía no hay viviendas inundadas.
El funcionario añadió que todavía falta para que llegue el registro más alto del río y que, mientras tanto, la Comuna está abocada a la extracción de agua mediante bombas en los lugares más comprometidos. En Bajada Grande siguen funcionando los sistema de extracción –se trata de dos bombas que sacan 150 mil litros por hora cada una, detalló–. Otras dos funcionan en Puerto Viejo, en sectores aledaños al Club de Pescadores, y otras en Puerto Sánchez.
Advierten que esta semana, el río creció “mucho en poco tiempo”
La altura del río frente a las costas de Paraná alcanzaba ayer a 5.53 metros, 2.03 metros más que la media promedio pronosticada para esta época del año. Según se informó desde la sede local de Prefectura Naval Argentina, la altura normal ronda los 3.50 metros, mientras que para esta temporada las estimaciones advierten que el caudal seguirá creciendo. Así, las previsiones del área anuncian que para el 11 de febrero, la altura del río estaría en los 5.65 metros y para fin de mes podría rondar los 6 metros.
“Estamos haciendo estadísticas día a día y el río tiene un tendencia a seguir creciendo”, informó a EL DIARIO, el subprefecto Luis Alberto Portela. Seguidamente, se refirió al comportamiento del río en la última semana: “El lunes estábamos en 5.38 metros y hoy (por ayer) tenemos 5.53 metros. Es mucho en poco tiempo”, afirmó y dijo que entre el lunes y el miércoles, subió 6 centímetros.
En las lluvias puso énfasis Portela, quien dijo que se están produciendo tanto en territorio argentina, como en el sur de Brasil y Paraguay. En eso basó la probabilidad firme de que el río siga subiendo. A continuación aclaró que desde Prefectura no se habla de fecha pico –de crecida-, pues depende del clima y según, los pronósticos meteorológicos, seguirá lloviendo. Tampoco se trata todavía de un récord –apuntó-, en relación a los registro de la crecida de 2007.
BREVE
LLOVER SOBRE MOJADO
Defensa Civil asiste a familias evacuadas
Desde la Dirección de Defensa Civil se informó ayer de la existencia de evacuados y autoevaluados en las ciudades de La Paz, Paraná, Victoria, Gualeguay e Ibicuy tras las intensas lluvias registradas en los últimos días.
“En todos los lugares el gobierno provincial está trabajando desde el primer momento, asistiendo en todo lo necesario a los afectados, mediante un trabajo conjunto con los municipios”, aseguró el titular de Defensa Civil, Roberto Destri.
Precisó que el jueves llovió principalmente en el sur y centro de la provincia. En Nogoyá llovieron 70 milímetros, en la costa del Uruguay, con menos intensidad que en el centro de la provincia, hubo caída de algunos árboles y carteles; y en Villaguay llovieron 51 milímetros.
Respecto a lo acontecido en la madrugada del viernes, Destri indicó que llovió en la zona norte de la provincia, en las ciudades de Federación, Concordia y Chajarí. En esta última localidad llovieron 90 milímetros y se vieron afectados cuatro barrios. También, en la costa del Uruguay y en Gualeguay donde hubo caída de granizo pero sin afectar nada.
AFECTADOS. “Hasta ahora lo más afectado que tenemos es la costa del Paraná por la crecida del río”, indicó Destri. Y precisó que en La Paz hay cuatro familias autoevacuadas; en Paraná también hay evacuados en la zona de arroyo Las Viejas y Bajada Grande; en Victoria hay una familia evacuada y una autoevaluada; en Gualeguay hay 70 personas del Distrito Séptimo afectadas por la crecida del agua y en el Distrito Octavo unas 40 personas y cuatro familias en la zona de Puerto Ruíz donde se está a cinco centímetros de llegar al nivel de evacuación. Y en Ibicuy se cortó el camino alternativo que fue tapado por el agua. “En todos los lugares el gobierno provincial está trabajando desde el primer momento, asistiendo en todo lo necesario a los afectados, mediante un trabajo conjunto con los municipios”, aseguró el funcionario provincial.
Finalmente, dijo que el pronóstico prevé tiempo inestable hasta el lunes, con probables lluvias.
|
|
|