Intendentes, funcionarios y productores se reunirán este miércoles en General Pinto ante el temor del avance del agua y en busca de intentar destrabar las obras del río Salado que, según denuncian, están paralizadas desde hace más de dos años
La reunión contará con representantes de las comunas de Junín, General Villegas, Ameghino, General Arenales, Vedia y General Viamonte, a la vez que funcionarios provinciales y nacionales. La exigencia de estos partidos pasa por la reactivación de las obras del denominado Plan Maestro del río Salado, que contempla trabajos entre el partido de Castelli (en la Bahía de Samborombón) hasta General Villegas, en el extremo noroeste de la provincia, y sus ramificaciones hacia la zona oeste.
En ese sentido, dirigentes rurales se juntaron el miércoles último en Junín y habían pedido que vuelva a sesionar el Comité de Cuenca del Salado que integran los intendentes del noroeste, algo que finalmente sucederá mañana.
La idea es retomar las gestiones ante Nación para destrabar los fondos necesarios que vuelvan a poner en marcha las obras del Salado que incluyen dragado, canalización y obras de regulación hídrica.
El río Salado abarca una cuenca de 17 millones de hectáreas, de donde proviene casi el 30 por ciento de la producción agropecuaria del país. Los trabajos hidráulicos se financian con parte Fondo Hídrico que percibe el Gobierno nacional por la venta de naftas y GNC.