Faltan 17 días para que termine el mes y expiren, al menos en los plazos teóricos, las medidas restrictivas de consumo de agua que dispuso en noviembre pasado la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Provincia. Y es casi seguro que la Provincia prorrogará la emergencia porque las lluvias no han sido lo generosas que se esperaba.
“Es muy probable que se prorroguen las restricciones que vencen a fines de febrero”, indicó a este diario el titular del área, Jorge Masih. La semana próxima, Recursos Hídricos y el Ersep evaluarán la situación. Esto significa que no se podrán regar jardines, lavar autos particulares, ni llenar piletas.
Se seguirá considerando consumo excesivo cuando el usuario exceda los 35 metros cúbicos mensuales. El director del Ersep, Jorge Saravia, indicó que ya se han librado 100 órdenes de servicio para que Aguas Cordobesas instale medidores a quienes se les detecte un gasto por encima de los 35 metros cúbicos.
La lupa está puesta a futuro. Con el enero más seco de la década (43 milímetros caídos en la ciudad de Córdoba, un tercio del promedio habitual), se avizora un año todavía más complicado que 2009 si no llueve en abundancia antes de abril, cuando comienza la estación seca.
Es que los embalses de la provincia, que debían llenarse en la estación de lluvia, están muy bajos.
Audiencia, sin fecha. En tanto, Saravia informó que la semana próxima, el directorio del Ersep decidirá la nueva fecha de la audiencia pública (estaba fijada el 25 de enero y se prorrogó) por el aumento del servicio de agua en la ciudad de Córdoba y la aplicación de un cargo tarifario para financiar la instalación de 100 mil medidores en cuatro años. La empresa Aguas Cordobesas solicitó un ajuste del 10,58 por ciento por el período enero-setiembre de 2009.
En ese sentido, el legislador José Maiocco (Unión Vecinal Federal) presentó ayer un pedido de informes al Ejecutivo para que precise si el cargo fijo será permanente; si lo pagarán aun los que ya abonaron el propio y el costo del medidor.
Tres fotos
Las lluvias llenaron el embalse de La Cumbre
Las últimas precipitaciones revirtieron la situación de sequía en La Cumbre y el dique San Jerónimo colmó su capacidad de 350 millones de litros.
Esta localidad del centro norte de Punilla, hasta días atrás, venía atravesando la más crítica situación por falta de agua potable para los vecinos del este valle turístico.
La crisis hídrica se desató los últimos 15 días del mes pasado, siendo especialmente afectados el casco céntrico y los barrios Potrerillos, San Jerónimo y Golf Club, que vieron cortado totalmente el servicio y contabilizando poco más del 30 por ciento de la población del lugar.
En el resto se restringió severamente el consumo, pero no llegó a cortarse, gracias a una cisterna de un millón de litros que fue provista por una perforación y una bomba especialmente instalada. De seis años a esta parte, la Municipalidad invirtió tres millones de pesos en obras hídricas y mejoramiento del sistema de distribución.
El intendente Carlos Engel enfatizó a este diario que “estuvimos hasta hace escasos días en una sequía histórica que hace 36 años no ocurría en La Cumbre, con menos de 250 milímetros de precipitaciones que la media normal”.
No obstante, la situación en los demás embalses de la provincia de Córdoba sigue siendo crítica. Según la Subsecretaría de Recursos Hídricos, entre el 10 de febrero y el 10 de diciembre, el dique San Roque está casi igual, Los Molinos apenas subió un metro y La Quebrada –que abastece al Gran Córdoba– siguió en baja.
El dique San Roque, que abastece al 70 por ciento de la ciudad de Córdoba, registró en diciembre un nivel de 28,02 metros, en enero 29,10 metros y ayer 28,92 metros, 6,38 metros por debajo del vertedero.
En tanto, el dique Los Molinos, que abastece al 30 por ciento restante de la capital provincial, registró ayer 46,94 metros, seis metros por debajo del nivel de vertedero. En diciembre, el embalse tenía un nivel de 45,76 metros y en enero 46,98.
En las Sierras Chicas la situación es aún más preocupante, ya que el dique La Quebrada continúa con una bajante más que pronunciada. Ayer, registró un nivel de 20,82 metros, 13,18 metros por debajo del vertedero. Además, bajó casi un metro respecto de enero, cuando tenía un nivel de 21,96 metros.