Electricidad de Misiones aclaró que las cooperativas de agua en su conjunto adeudan a la empresa eléctrica un total de 42 millones de pesos –en capital e intereses- por suministro no abonado, pese a lo cual, la empresa provincial no les corta la energía para no perjudicar a los habitantes que dependen del vital servicio.
Aún con abultadas deudas, la mayoría de las cooperativas de agua se acercó a la prestataria provincial para acordar planes de pago beneficiosos en los que se reconsideran cuotas posibles de abonar y hasta quita de intereses, por lo que en la actualidad lograron honrar su responsabilidad al frente de los consejos de administración e iniciar un saneamiento de las deudas.
No es el caso de algunas entidades puntuales, que pese a las constantes invitaciones de la empresa –que incluso recurrió a intimaciones y cartas documentos-, adeudan facturas de luz desde enero del año 2000. Como ejemplo de este desmanejo financiero, la Cooperativa de Servicios de Agua Potable de San Ignacio Limitada adeuda a Emsa un total de 7.762.048,26 pesos (siete millones, setecientos sesenta y dos mil cuarenta y ocho pesos) por el consumo eléctrico en sus cinco conexiones, configurándose uno de los casos más graves de desinterés por regularizar esta situación ya que sus responsables no se acercaron a proponer planes de pago ni soluciones de ningún tipo.
Emsa también recuerda que el cuadro tarifario es único en toda la provincia, tanto para los clientes de esta empresa como para las Cooperativas, por lo que no es correcto plantear “el alto costo de la energía que cobra Emsa” como causal de los desfasajes financieros de las Cooperativas de Agua. Prueba de ello es que la mayoría de los consejos de administración dio pruebas de un manejo financiero responsable –seguramente no exento de problemas- al hacer frente a sus compromisos, en tanto que sólo en unos pocos casos no se da esta situación, hecho ajeno a la empresa Emsa y del que deberán tomar debida cuenta los usuarios de agua que pagan mes a mes sus facturas.