La intendencia de San Isidro denunció esta semana al gobierno bonaerense por “impedir el acceso del personal municipal para la puesta en marcha de la estación de bombeo número once con el fin de evitar el anegamiento de viviendas cercanas al río Reconquista”.
El intendente Gustavo Posee culpó a la Provincia del problema provocado en el Bajo Boulogne, donde durante la tormenta del lunes fueron afectadas “cerca de 400 personas” cuando el agua ingresó en las viviendas cercanas al Reconquista.
El secretario de Obras Públicas comunal, Bernardo Landívar, relató que al enterarse de que el agua se estaba desbordando el lunes a la noche, llamó a un operario de la Municipalidad de San Isidro para que vaya a verificar la situación.
“Al rato me llama diciendo que el personal que está a cargo de la estación no lo deja entrar y voy hacia la estación. Cerca de las 23.30 veo a dos operarios de la estación saliendo: ¡Recién habían encendido las bombas!”, relató. Según el funcionario, “si las hubiesen encendido a las 17 no se hubiese inundado Boulogne”.
“Esto no es la primera vez que ocurre, traté de hablar con el director provincial de hidráulica y no estaba. Aun nadie dio una explicación” relató Landivar. Un episodio similar había sucedido en febrero de 2006, ocasión en la que el municipio realizó una denuncia penal.
La estación de bombeo número once está ubicada cerca de la rotonda del Buen Ayre y en las márgenes del nauseabundo río Reconquista. Su función es evacuar las aguas que inundarían el Bajo Boulogne cuando el río crece, y lo hace con cinco bombas que permiten evacuar 73 millones de litros por hora