Las lluvias producidas entre la tarde noche del viernes y la madrugada de ayer provocaron una suba de más de medio metro en los niveles que presentaban hasta entonces los diques San Roque y La Quebrada.
En las Sierras Chicas, fueron particularmente intensas las precipitaciones del viernes a la noche y el sábado a la madrugada (promediaron 56 milímetros en toda la cuenca) y más leves durante el resto del fin de semana.
Ayer al mediodía, el dique La Quebrada se encontraba a 12,92 metros del tope de su vertedero, cuando el viernes el faltante superaba los 13,45 metros.
Pese a este aumento de más de medio metro, la situación siguen siendo crítica y por esta razón se mantienen por tiempo indefinido los cortes rotativos en Unquillo, Mendiolaza y Río Ceballos a la espera de que el acueducto que llega de La Calera pueda suplir la mínima cantidad de agua existente en La Quebrada.
En tanto, en la cuenca del lago San Roque las precipitaciones se produjeron con leve intensidad durante la noche del viernes, la madrugada y tarde del sábado y el amanecer del domingo. En las altas cumbres las lluvias fueron más intensas (promediaron los 50 milímetros) y generaron ayer dos nueva creciente del río San Antonio de más de un metro de altura cada una.
Al mediodía de la víspera el nivel del lago San Roque se ubicaba en torno a los 30,70 metros, casi 50 centímetros más que el viernes. Se esperaba un nuevo aumento a partir de una nueva creciente del San Antonio que se produjo por la tarde y de otra similar del río Cosquín. Igualmente al dique aún le faltan más de 4 metros para alcanzar el tope del embudo que actúa como vertedero.