Los efluentes cloacales en la ciudad de Diamante se arrojan directamente y sin tratamiento alguno a un desagüe pluvial que desemboca en el arroyo La Ensenada. La denuncia la hicieron los concejales del radicalismo, quienes pidieron la urgente intervención de la Secretaría de Medio Ambiente de la provincia.

SITUACIÓN. A través de un desagüe pluvial, que recorre la ciudad de Diamante de norte a sur, se arroja efluentes cloacales sin tratamiento. “Es una cloaca a cielo abierto”, denunciaron ayer los concejales del radicalismo, quienes pidieron, a través de una nota, la urgente intervención de la Secretaría de Medio Ambiente de la provincia.
“Hemos agotado las instancias municipales, por lo que ahora estamos pidiendo a Medio Ambiente de la provincia que intervenga en esta grave problemática que afecta a una vasta zona de la ciudad de Diamante”, indicó en diálogo con EL DIARIO, el concejal Fernando Pacheco, quien junto a los ediles Juan Colobig, Marta Gracielli y Nancy Albornoz, firmaron el pedido de intervención.
De acuerdo a la denuncia de los ediles, a través del desagüe pluvial, denominado Emisario Este, en forma constante se está vertiendo sin tratamiento alguno, los efluentes cloacales. “Este desagüe con agua contaminada atraviesa el barrio Las Flores, pasa por los terrenos donde se encuentra el proyecto termal, la zona oeste de Strobel y desemboca en el arroyo La Ensenada, el cual es utilizado aguas abajo para abastecer las piletas del complejo turístico Valle de la Ensenada”, se indicó.

CLOACA. “Nos vemos en la obligación de pedir la intervención de la provincia, porque esta situación está afectando seriamente a innumerables vecinos de esta ciudad”, dijo Pacheco.
Para los concejales, ante un problema concreto de contaminación, la provincia es co-responsable en la protección del medio ambiente. “En base a ese principio es que requerimos que la secretaría de Medio Ambiente intervenga en esta problemática”.
“Desde hace cuatro años, que la Municipalidad está arrojando los efluentes cloacales, sin tratamiento, a un zanjón que recorre la ciudad de norte a sur y desemboca en el arroyo La Ensenada”, describió el concejal.
A decir de los ediles, “es la propia Municipalidad de Diamante la que está agrediendo el medio ambiente, ya que esto es evitable con la puesta en funcionamiento de dos plantas elevadoras de líquidos cloacales que hace cuatro años no funcionan”.
Según se indicó, hasta hace cuatro años, estaban en funcionamiento esas dos plantas receptoras de efluentes cloacales que, a través de bombas propulsoras, elevaban los desechos a la zona de la red. Sin embargo, al no funcionar las bombas, “la Municipalidad vierte los líquidos contaminados al llamado Emisario Este, el cual fue diseñado para desagüe pluvial”, se denunció.
Los efluentes, sin tratamiento alguno, según describieron los concejales, viajan de norte a sur por la ciudad de Diamante, para luego desembocar en el arroyo La Ensenada.
Como consecuencia de “ese viaje”, los efluentes cloacales provocan a su paso “olores nauseabundos, proliferación de roedores, alimañas y todo tipo de insectos en la zona”, además, de representar un grave daño a la calidad de vida y salud de muchos vecinos, quienes deben convivir a diario con un ambiente seriamente contaminado”, se detalló.

DESIDIA. Para los concejales opositores, que los efluentes cloacales se vuelquen directamente y sin tratamiento alguno al arroyo “es producto de la desidia e inoperancia” y se estaría incumpliendo con el artículo 85 de la nueva carta Magna provincial que declara que el agua es un recurso natural, colectivo y esencial para el desarrollo integral de las personas y la perdurabilidad de los ecosistemas”.
“Deseamos que la secretaría de Medio Ambiente tome intervención en esta problemática, si no es así, no descartamos presentar un amparo ambiental”, aseguró a este medio Pacheco.