Los intendentes del noroeste bonaerense nucleados en el recientemente constituido Comité de Cuenca del Río Salado volverán a reunirse este miércoles en General Pinto para monitorear el avance del agua en la región y presionar por la concreción de obras atrasadas.
A la reunión asistirán también productores agropecuarios de la región preocupados por la situación hídrica que ya afecta a un buen número de campos. Buscan presionar a los jefes comunales para que no bajen la guardia y continúen reclamando por las obras atrasadas.
Durante la primera reunión del Comité de Cuenca los intendentes se reunieron con funcionarios provinciales y nacionales que prometieron culminar dos obras de importancia en el tramo del Río Salado que atraviesa esa región: las obras de la laguna La Picassa (ya avanzada en un 50 por ciento) y las de la laguna La Salada (General Pinto) que, según informaron funcionarios de Recursos Hídricos de Nación, comenzarán a construirse en 4 meses.
No obstante, también restan realizarse una serie de obras secundarias de canalización, un reclamo que realizaron varios intendentes.