El desértico paisaje se encuentra a pocos kilómetros de la capital, precisamente en El Mollar. Las grietas que se dibujan en el lecho del lago de La Angostura son consecuencia de que se vació el embalse para reparar las válvulas y las compuertas. El nivel del agua ya no seguirá bajando, y las válvulas que estaban averiadas empezaron a repararse en seco, informó la Dirección Provincial del Agua. Su titular, Juan Sirimaldi, estimó que a partir del lunes 15 el embalse se irá llenando lentamente con las lluvias, y el año próximo recuperará su caudal habitual. |
|
|