Razones ambientales explican la mortandad de peces registrada en el río Yi a mediados del mes pasado. Así lo hizo saber ayer la Dirección Nacional de Recursos Acuáticos (Dinara), en reunión con el Comité Departamental de Emergencia.
La hipótesis que mayor fuerza cobra es la que da cuenta que el calentamiento de las aguas, que se encontraban en plena ciudad, y la competencia por el oxígeno con las plantas terminó siendo el desencadenante.
El análisis de las branquias, que no evidenció procesos de deterioro, junto a los valores insignificantes de glifosato en agua, que surgen del análisis realizado por OSE permitirían descartar la hipótesis de que ese agrotóxico fuera causante de la mortandad.
En oportunidad de la última crecida del río Yi, se produjo una mortandad de peces, de todas las variedades, que hizo pensar en la posibilidad de que se tratara de un fenómeno tóxico, a causa de la llegada de productos agroquímicos a la corriente de agua.
Sin embargo, enseguida que se constató el fenómeno, se produjo en Durazno la llegada de técnicos de la Dinara quienes estudiaron la situación y si bien no arriesgaron una opinión concluyente, expresaron la certeza de que se trataba de un fenómeno directamente relacionado con el mayor volumen de agua que arrastraba el río.
Con el agua salida de cauce y en áreas en las que alcanza muy poca profundidad, se da el caso de que los peces, por una cuestión de seguridad, buscan las zonas menos profundas.
Es allí, precisamente donde abundan especies vegetales y se da una competencia por el oxígeno que termina dejando a los peces sin el mismo.
Las pesquisas de Dinara, los escasos valores de glifosato constatados por OSE van en línea con el primer informe.